Es la conclusión a la que arribó la Asociación Latinoamericana de Integración (ALADI) en uno de sus tradicionales informes. Advierte sobre la desaceleración de la economía y, aunque el balance es positivo, se mantiene la incertidumbre
Según la Tercera Proyección Anual que realiza formalmente ALADI, durante los primeros meses del año la economía mundial comenzó a sentir los efectos de la crisis financiera ocasionada en Estados Unidos, pero la desaceleración fue menor a la prevista. En este contexto, los precios de los productos básicos continuaron incrementando produjo presiones inflacionarias en todos los países de la región, más significativas en aquellos países que se encuentran menos desarrollados .
Por esto, es que el dilema que habrá que evitar será la perjudicial combinación de recesión e inflación. La combinación de factores es delicada: muchos países desarrollados experimentan caídas en su producto, en las economías emergentes la actividad se desacelera y la inflación obliga a las autoridades monetarias aplicar políticas restrictivas que, a su vez, son un freno en la recuperación de la economía.
Los países que forman la región han registrado la desaceleración que se siente a nivel global y se profundizará en las estadísticas de esta mitad del año. Sin embargo, ALADI proyecta casi un 5% (4.7) de crecimiento para 2008.
El comercio internacional regional se proyecta con un incremento cercano a un 20.9% de exportaciones y un 23.8% en las importaciones pero lo más significativo es la cifra de las transacciones intrarregionales que se estiman en casi un 28 % de crecimiento. Brasil y Argentina son los principales compradores locales, seguidos por Chile y Venezuela. México registraría una leva reducción y Colombia un pequeño crecimiento. En cuanto a la participación del comercio intrarregional a nivel global se mantendría el nivel de importaciones (18 %) y se destacaría un crecimiento de casi un 16 % para las exportaciones.
En este contexto de incertidumbre internacional y elevados precios de los productos básicos, el PIB del conjunto de los países de la ALADI creció en el primer trimestre de 2008 un 5,2% respecto a igual período del año anterior y se estima que habría alcanzado una tasa similar para el segundo trimestre del año. Dicho crecimiento implica una desaceleración respecto al ritmo registrado en los dos años previos (5,6%-5,7%) y se espera una desaceleración adicional en el resto del año.
ALADI señala que se mantienen los niveles de incertidumbre debido a una fase de recesión generalizada en los países desarrollados y, en particular, al comportamiento futuro de los precios de los productos básicos.
(Fuente: deNeXos)