La finalización de los trabajos de pavimentación de los últimos seis kilómetros del lado argentino del Paso de San Francisco permitió el inicio del tránsito comercial hacia el Pacífico a través de esa vía, después de casi nueve años de espera de las provincias de Catamarca, La Rioja, Córdoba, Santiago del Estero y Tucumán y la III Región de Atacama en Chile.
Luis Humberto Rebellato, Secretario de Estado de Coordinación Regional e Integración del Gobierno de Catamarca, comentó que el fin de las tareas de pavimentación “marca un hecho histórico, que coloca al corredor en una situación distintiva, brindando ventajas comparativas para quienes quieran salir hacia el Pacífico por el norte del país”.
Rebellato anunció además que durante el último trienio de 2008, con un plazo de tres años, se iniciará la pavimentación de 109 kilómetros del lado chileno, “por los que la provincia ha venido reclamando en distintos foros internacionales”, dijo, a partir de un acuerdo firmado entre el Gobierno Regional de Atacama y el Ministerio de Obras Públicas de Chile, con la presencia de su presidenta, Michelle Bachelet.
“El paso es utilizado principalmente por camiones que trasladan, desde Chile, insumos con destino a Minera La Alumbrera. En agosto de 2006 comenzó el transporte de bolas de acero para la molienda del mineral en la mina provenientes de Talca y Antofagasta en Chile. Luego, se incorporó el transporte de cargas generales y alguna maquinaria temporal, siempre entre la mina y Chile” detalló el funcionario.
Sin embargo, al finalizar la pavimentación, “se inició el transporte de cereales con destino a La Calera; desde la localidad de Los Altos en el este catamarqueño. Se trata de soja con destino a una empresa chilena de gran envergadura que comercializa carne de cerdo con la cuenca del Asia-Pacífico, con un promedio de 300 camiones mensuales”.
Para Rebellato “las inversiones generan una perspectiva de desarrollo realmente importante para Catamarca, dado que el paso está ubicado en una zona estratégica que abre la posibilidad para las provincias de la región y para los usuarios en general de una conexión directa con Chile y la cuenca del Asia Pacífico, uno de los mercados más demandantes del mundo”.
Según el secretario de Estado catamarqueño, las ventajas comparativas que presenta el Paso San Francisco respecto de otros cruces entre Argentina y Chile son “la conexión por vía terrestre con los puertos de Huasco, Caldera y Chañaral, donde desemboca la vía; que se incorpora a un corredor bioceánico, que se inicia en la ciudad de Porto Allegre en Brasil y termina en el Pacífico en los puertos de la III Región de Chile”.
Enfatizó además que “sus características de transitabilidad, cuyas pendientes no superan el cuatro por ciento, permiten que el transporte de carga circule sin inconvenientes por la zona; a lo que se debe sumar que, salvo pocas excepciones, se encuentra abierto la mayor parte del año”.
Rebellato especificó que la vía que nace en Catamarca en la ciudad de Tinogasta y. culmina luego de 250 kilómetros en el límite internacional, a 4.750 metros sobre el nivel del mar, “cuenta con servicios de Aduana, Migraciones, SENASA y primeros auxilios en la misma cordillera de los Andes. De igual modo, se atiende su circulación con equipos viales de la Nación y la Provincia que, ante eventos meteorológicos, garantizan su rápido despeje”.
(Fuente: Prensa Expotrade para suplemento Transporte & Logística de La Nación)