La alta demanda del evento exige anticipación, precisión operativa y comunicación efectiva con los clientes.
Cada vez que el calendario marca el inicio del Black Friday, este año previsto del 28 de noviembre al 1 de diciembre, lo que salta a la vista son los descuentos, los clics y las promociones virales. Pero detrás de ese movimiento visible hay un engranaje que lo hace posible: la operación logística nacional que transforma la venta en entrega.
En la Argentina, el comercio electrónico alcanzó niveles que hace pocos años hubieran parecido imposibles. Según datos de la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (CACE), en el primer semestre de 2025 el sector alcanzó una facturación de $15.317.918 millones, con un crecimiento del 79% frente al mismo período de 2024. Ese volumen, explicó Lucas Bianchi, CEO y fundador de Interborders, “exige mucho más que una web rápida o una campaña llamativa: requiere centros de distribución listos, transporte eficiente y rutas de última milla que funcionen sin fisuras”.
El desafío logístico comienza antes del clic. Cuando una empresa entiende que nueve de cada diez consumidores en Argentina compra online y que cerca del 55% de las entregas requiere envío a domicilio, el foco se traslada a la ejecución. “Esa primera milla y esa ruta final representan tanto la línea de meta como el mayor riesgo: demoras, stock agotado o transportes saturados pueden afectar toda la experiencia”, dijo Bianchi.
Para esta edición del Black Friday, Interborders construyó su estrategia en tres frentes: anticipación de volumen, optimización operativa y comunicación al cliente. El primer eje apunta a prever rutas críticas, asegurar espacios de transporte y dimensionar depósitos. El segundo se centra en consolidar cargas cuando corresponde, mejorar el embalaje y garantizar trazabilidad digital. Por último, el tercer ítem busca informar tiempos reales y asegurar que la promesa de entrega se cumpla.
“La experiencia del consumidor no solo depende del precio, sino de que lo que compró llegue a tiempo y en buenas condiciones”, agregó Bianchi. En fechas como esta, la logística deja de ser un apoyo para convertirse en la columna vertebral del comercio electrónico masivo en la Argentina.




