La “boom” de la industria automotriz acarrea buenas expectativas también para el sector de la reconstrucción del neumático que, gracias a la tecnología y a las instituciones, se vuelve cada vez más seguro y sustentable.
En los últimos años la industria del neumático se ha enfocado en aumentar el rendimiento a través de la optimización de los elementos con que se construyen. Esto se logra dotando a los neumáticos de mejores y más adecuados compuestos de caucho y carcasas perfeccionadas para que puedan ser reconstruidas. De esta forma se genera, al final del balance, una importante explotación del producto.
Ante esta situación, se incrementa notablemente la utilización de una solución de antaño: el recapamiento o recuperación, recurso que presenta grandes beneficios a los neumáticos grandes. En la actualidad, la tecnología contribuyó al avance de los procesos de reconstrucción, también la maquinaria que se utiliza ya es toda de punta. Sumado a esto, se han logrado compuestos de alto rendimiento, asemejando el kilometraje al de neumáticos nuevos. Incluso el INTI está comenzando a certificar la recuperación a través de los Códigos de Homologación (CHAS).
“La reconstrucción de neumáticos para el transportista, en este momento es fundamental, por los costos”, dijo en declaraciones a Radiotransporte Julio Cesar Larocca, presidente de la Asociación de Reconstructores de Neumáticos. “Aparte –continuó-, el neumático nuevo, se ha aggiornado muchísimo a la calidad de los vehículos nuevos y realmente el costo por kilometro es muy importante desde la compara hasta la finalización de la vida útil del neumático”.
Además consideró que con la reconstrucción de los neumáticos “aportamos muchísimo a los costos del transportista”, es por eso que “pienso que ya es una necesidad para el transportista usar este método y lo hacen en un 90 % aproximadamente”, dijo.
Anteriormente, la reconstrucción o recapado de neumáticos era mal vista, como un producto de segunda calidad. En Argentina, particularmente, fue una actividad relativamente resentida durante la década de los`90 debido al precio accesible de los neumáticos nuevos, que reducía el beneficio de recuperarlos. Hoy en día, la tecnología produjo avances en la industria y la maquinaria que se utiliza es mayormente de punta
Hoy en día hasta los fabricantes de neumáticos tienen en cuenta esta posibilidad y, del mismo modo, también lo evalúan quienes comprar neumáticos nuevos, “los fabricantes de neumáticos están trabajando fuertemente en la postventa de ese neumático nuevo y confían en nosotros los talleres de reconstrucción que, con los elementos de seguridad y calidad asistidos por ellos, dan una segunda vida, incluso con garantía de su casco original al transportista”, sostuvo Larocca, que también es directivo de la Federación Argentina de Neumáticos.
Para la reconstrucción de neumáticos, las materias primas que se utilizan son cauchos sintéticos y naturales principalmente, además de otros aditivos químicos para darle ciertas características físicas al producto. Así el proceso es igual al de fabricación de neumáticos nuevos
Nueva certificación
Larocca contó que desde la Asociación y la Federación que los nuclea a los precuradores de neumáticos, se está trabajando conjuntamente con el INTI, en la certificación obligatoria de los talleres de reconstrucción de neumáticos “dando cuenta de la ley 24449 de transito y seguridad vial, sobre los repuestos. Dentro de muy poco vamos a tener la certificación obligatoria, que va hacer que los transportistas tengan asegurado su trabajo con talleres que estén en condiciones de hacerlo”.
¿Qué indicadores demuestran la calidad del trabajo de recapado? “Hay muchos talleres que están en condiciones óptimas para reconstruir neumáticos y otros clandestinos, o que no presentan la calidad necesaria en los servicios. Justamente desde la Asociación lo que estamos haciendo es tratar de enrolar a la máxima cantidad de talleres para que realmente esto se nacionalice.
¿Cómo está trabajando el mercado?
Respecto a la actividad en lo que va del año, el titular de Precurados San Justo hizo una evaluación positiva: “estamos trabajando bien, tenemos una clientela muy importante, somos un taller mediano y tenemos una producción de entre 1000 y 1500 cubiertas mensuales. Hay talleres que están haciendo hasta 3.000 cubiertas pero dentro de la misma calidad otros más chicos ahacen entre 300 y 500 cubiertas mensuales”.
Fuente: Radiotransporte
ABE – 11/082011