La empresa sueca Volvo presentó el ESP, un programa que reduce los riesgos de vuelcos y derrapes en curvas en situaciones límites
En tiempos en que la seguridad se tornó atributo indispensable, Volvo ratificó su interés en materia de desarrollo e implementación de sistemas y dispositivos capaces de disminuir notablemente el riesgo de accidentes, al presentar el ESP (siglas del inglés Electronic Stability Program), un programa de estabilidad para reducir riesgos de vuelcos y derrapes en curvas.
Carlos Pacheco, presidente de Volvo Trucks and Buses Argentina explicó que “seguridad activa es el conjunto de dispositivos y sistemas que ayudan al conductor a evitar accidentes”, y el gerente comercial de la empresa, Eduardo Álvarez, agregó que “seguridad pasiva es el conjunto de sistemas que ayudan a minimizar los efectos para los pasajeros, el conductor y el propio vehículo y el tránsito en el entorno, en el caso de un accidentes”.
“Volvo es un líder mundial en el desarrollo de dispositivos y sistemas para la seguridad activa y pasiva para vehículos tanto de carga, como de pasajeros y estamos muy orgullosos de nuestros constantes logros en ese terreno. Como desde un comienzo, uno de nuestros valores fundamentales siempre fue la seguridad, todos nuestros desarrollos están y siempre estuvieron, fuertemente orientados hacia ella” afirmó Per Gabell, presidente de Volvo Bus Latin America.
Los directivos de la empresa sueca participaron el pasado 5 de septiembre, en la base aérea de Campo de Mayo, de la presentación en público del ESP recientemente incorporado a su línea, que incluyó muestras teóricas y prácticas de su funcionamiento.
“Debemos tener en cuenta que ESP, ya es un sistema ampliamente probado y reconocido, que en 2009 se tornará obligatorio por reglamentación en Europa” destacó Pacheco, al refirirsee a la normativa UE que entrará próximamente en vigor. Y completó “hemos querido adelantarnos con el lanzamiento en Argentina, porque sentimos que será de gran eficacia para la drástica reducción de accidentes con vuelcos”.
“El ESP es considerado la mayor y más reciente contribución, en materia de seguridad vehicular desde la implementación del cinturón de seguridad” afirmó Alvarez y Gabell completó “cuando decidimos incorporar ESP a nuestra línea de ómnibus en Argentina y Latinoamérica, lo hicimos pensando en que sería una eficaz contribución para reducir el riesgo de accidentes con vuelcos, con ómnibus de transporte de pasajeros”.
Durante la exhibición, pilotos de prueba suecos especialmente capacitados, realizaron pruebas dinámicas comparativas entre vehículos con y sin sistema ESP, simulando condiciones reales de manejo en ómnibus B12R doble piso, de orígen en el Mercosur, semejantes a los que ya operan en las más importantes empresas de transporte de pasajeros en nuestro país, circulando a velocidades límite para la pérdida de estabilidad o vuelco inminente y alternando el uso del dispositivo para evidenciar las diferencias que proporciona el sistema de control de la estabilidad.
“Ya hemos realizado diversas pruebas de esta naturaleza en todo el mundo; recientemente lo hemos hecho en Sao Paulo, Brasil, por ejemplo y puedo asegurar que en todas ellas las personas quedan admiradas al verificar la capacidad del sistema ESP de estabilizar el vehículo sin la intervención del conductor”, comentó Gustav Bengtsson piloto de pruebas sueco especialmente capacitado por la montadora escandinava para realizar las presentaciones de sus sistemas de seguridad activa y pasiva.
Aseguró el especialista que “en la mayoría de los casos que hemos reproducido aquí, si no se hubiera usado ESP, en condiciones reales de operación, el derrape y posterior vuelco del ómnibus habría sido inevitable. Sin ESP, una vez que se pierde el control del vehículo, es muy difícil evitar lo peor. Pero el sistema actúa en forma rápida y precisa, sin la intervención del conductor”.
Mientras se realizaba la demostración, Gabell precisó que el “ESP es un sistema de seguridad activa que interviene automáticamente en situaciones límite, con una rapidez y precisión que no podría ser igualada por el conductor más experto. Definitivamente se trata de un avance tecnológico inmenso para reducir el riesgo de accidentes”.
Según Álvarez el “ESP es una gran ayuda para conductores, en situaciones extremas, ya que en tales situaciones, ya sin espacio ni tiempo para maniobras, el sistema actúa automáticamente, en forma rápida y precisa, para corregir la trayectoria del vehículo sin que el conductor tenga que intervenir durante la maniobra”.
La pista fue especialmente preparada para la prueba y en ella se reprodujeron las dos situaciones más frecuentes y riesgosas de pérdida de estabilidad con posterior derrape y/o vuelco. La primera, el desvío brusco por obstáculos sorpresivos en la carretera, especialmente en condiciones de baja visibilidad, tales como: animales sueltos, vehículos detenidos o circulando en forma lenta y desvío por vehículos circulando en sentido contrario por la contramano. La segunda se concentró en la pérdida del control del vehículo en curvas regulares, causada por factores como: exceso de velocidad, mal trazado del peralte y obstáculos o defectos de superficie del asfalto.
Alvarez detalló que existen dos situaciones de desvío de trayectoria por pérdida de estabilidad: el subviraje, que se produce cuando el vehículo entra en una curva y a continuación el trazado se cierra más de lo esperado, o cuando en medio de la trayectoria sobre la curva se precisa esquivar un obstáculo, o la superficie de la misma aparece resbaladiza, por lo que el vehículo no consigue girar lo suficiente para acompañar el trazado y tiende a derrapar el tren de ruedas delantero hacia el lado externo o seguir una trayectoria casi recta.
La otra situación es el sobreviraje, que se produce cuando un vehículo entra en la curva girando más de lo necesario. En ese caso, tiende a derrapar con su tren trasero hacia el lado externo de la curva. Además, pueden presentarse situaciones de pérdida de estabilidad producidas por secuencias de subviraje y sobreviraje, lo que comúnmente ocurre en una sucesió
;n continua de curvas a izquierda y derecha, en la que surge un movimiento de balanceo alternado de la carrocería. En estas situaciones, si se produce un giro del vehículo sobre su eje vertical, el riesgo de vuelco es inminente.
Pero, en cualquiera de esos casos el sistema de control de estabilidad ESP actuaría en forma instantanea y preventiva, corrigiendo la trayectoria, por aumento o disminución el giro, a través del frenado selectivo e independiente de las ruedas del vehículo, y reduciendo simultáneamente el torque del motor en la medida de lo necesario.
El sistema ESP opera siempre sin la necesidad de intervención del conductor, manteniendo una frecuencia de verificación constante de la situación del vehículo, por medio de diversos sensores localizados en puntos específicos del chasis, con una frecuencia de 25 lecturas por segundo.
Los directivos de la empresa sueca hicieron especial hincapié en que, desde su fundación en 1927, Volvo ha desarrollado e implementado diversos dispositivos y sistemas de seguridad que no sólo revolucionaron el mercado en diversos momentos, sino que frecuentemente han servido de orientación para la elaboración de legislación y reglamentación en materia de seguridad vehicular.
Un verdadero ángel de la guarda
Antes de que comenzara la exhibición, Eduardo Álvarez comentó ante los periodistas que “en septiembre de 2004, la US National Highway Safety Administration publicó un informe en el cual afirmaba que el sistema ESP reduce el riesgo de vuelcos en automóviles en hasta un 35% comparado con los mismos modelos sin el equipamiento. Pero en vehículos con centro de gravedad alto la eficacia del sistema aumenta, llegando a reducir en hasta un 67% el riesgo de accidentes con vuelcos”.
Pacheco acotaba que “en todos los casos ESP actúa siempre en forma inmediata y precisa corrigiendo la trayectoria del vehículo, aumentando o disminuyendo el giro, a través del frenado selectivo e independiente de sus ruedas y/o simultáneamente reduciendo el torque del motor en la medida de lo necesario” y agregaba que “ESP es un verdadero ángel de la guardia para el vehículo, el conductor y los pasajeros”.
Un elemento más en una larga lista
El ESP se sumó a una serie de innovaciones en materia de seguridad que Volvo, inventora de los cinturones de seguridad, fue incorporando en los últimos años. Entre ellas, la empresa ha puesto énfasis en:
– Corte de electricidad y combustible desde el tablero
– Suspensión electrónica inteligente ECS
– Computadora de diagnóstico a bordo
– Limitador electrónico de velocidad
– Control electrónico de velocidad
– Frenos Electrónicos inteligentes EBS-5
– Caja de direccion con relacion variable
– Barra de direccion colapsable
– Frenos a disco en todos los ejes
– Ayuda de arranque en pendientes
– Control de traccion TCS
– Ayuda para descenso de pendientes
– Sistema de frenos ABS de 6 canales
– Suspención independiente en el tercer eje
– Diagnóstico de funcionamiento de las luces
– Alarmas de incendio
– Freno motor VEB de 390 cv
– Corte electrico y de combustible externo
– Caja de velocidades inteligente I-Shift
Redacción Expotrade
para Suplemento de Transporte & Logística
de La Nación