La empresa norteamericana había mandado el telegrama de despido a cerca de 500 empleados de una planta próxima a Rosario, Santa Fe, pero fueron restituidos por una conciliación obligatoria que dictaminó el Ministerio de Trabajo de esa provincia. Ante la crisis financiera y las bajas en las ventas a nivel nacional e internacional, General Motors despidió a 435 trabajadores de su planta de Rosario. Pero los mismos fueros reincorporados gracias a una conciliación obligatoria que ordenó el Ministerio de Trabajo de Santa Fe.
La medida regirá por 15 días hábiles y vence a mediados de noviembre, tiempo en el cual GM se reunirá con autoridades del Ministerio de Trabajo para explicar sus planes y buscar una alternativa para que en caso de insistir con los despidos, se hagan de la manera menos traumática posible.
Por su parte, GM ya mantenía un conflicto con el Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (Smata) por el despido de un empleado y ahora la relación empeoró luego de que la organización reclamara en contra de la medida de despedido sorpresivo y masivo.
Mientras tanto las instalaciones permanecerán cerrada hasta el 3 de noviembre, un cierre temporario previsto desde hace un tiempo para realizar ajustes técnicos.
Por otra parte y por el mismo motivo, Renault pretendía despedir a 620 empleados en la fábrica de Córdoba, pero gracias a un acuerdo de Smata de esa provincia la cifra se redujo a 300 personas, que trabajaban mediante contratos y serán indemnizados.
Fuente: Terra
