Menor peso, más rentabilidad

Metalúrgica Stoessel produce desde el centro bonaerense, unidades que permiten concretar el anhelo de los transportistas de a menor peso más rentabilidad, con mayores beneficios.

 

Fruto del espíritu emprendedor de José Luis Stoessel, hace más de 20 años nació Metalúrgica Stoessel, una pujante empresa afincada en la ciudad bonaerense de Olavarría, dedicada a la fabricación de carrocerías, acoplados y bateas. En la actualidad, la firma emplea a 30 personas y produce un promedio de 14 unidades mensuales en las dos plantas urbanas donde diversifica su labor, aunque ya dio sus primeros pasos el proyecto de unificar la producción, a través de una nueva planta fabril situada en el Parque Industrial de la Capital del cemento.

El intenso trabajo y la experiencia de su director y propietario lo puso en la búsqueda de nuevas alternativas, además de la calidad de su trabajo, que le permitieran diferenciarse de la competencia. En tal sentido, Metalúrgica Stoessel implementó una línea de producción para utilizar en la fabricación de sus unidades, aceros Domex. Este material, de origen sueco, posee la virtud de lograr un menor peso de la unidad, con similar resistencia que el acero convencional, y por ende, brindarle al transportista una mayor capacidad de carga y rentabilidad.

“A raíz de que hemos conocido Aceros Domex, hemos mejorado notablemente nuestra producción en cuanto a beneficios para el transporte –señala José Luis Stoessel- en cuanto a un cambio sustancial en toda la cadena de producción. No sólo porque permite transportar más kilos, sino porque también permite reducir el consumo de cada unidad y, por lógica, mejorar la rentabilidad”.     

Como todo lo nuevo, la utilización de un nuevo material requirió del debido proceso para lograr los mejores resultados. “Al principio nos costó un poco adaptarnos al nuevo material, pero con dedicación y esfuerzo hemos logrado conocer muy bien el material y saber de las bondades que ofrece. La calidad y la resistencia que posee, permite bajar la tara (peso de la unidad),  considerablemente”, destacó el empresario.   

Dependiendo del producto solicitado y de acuerdo a la aplicación que le dé el transportista, el Domex permite bajar entre 1.500 y 2.000 kilos el peso final de la unidad. El costo es una de las preguntas que surgen rápidamente y al respecto, Stoessel dice: “Depende cómo se interprete lo de mayor costo. Yo creo que no es mayor; desde el punto de vista de la inversión inicial tiene un valor, pero la diferencia y teniendo el cuenta el plazo en el que se paga la unidad, más el trabajo que se va realizando con mayor productividad, permite que esa diferencia sea casi imperceptible y en 7 u ocho meses, cubrirla sin poner dinero del bolsillo. Ahí está el mayor beneficio”.

Más del 90% de la producción de Metalúrgica Stoessel está comprendida por unidades volcadoras, carrocerías, acoplados, bateas y semiremolques, que la firma está desarrollando con excelentes resultados.

“Es un nuevo producto que además de las virtudes del semiremolque, se le suma la posibilidad de ser volcador sin aumentar el peso y bajando la tara. Eso permite el transporte de algunos minerales u otro tipo de cargas móviles para las cuales el semiremolque es ideal. Creo que el semiremolque es más versátil y me parece que el transporte va en ese camino, saliendo del chasis-acoplado y reconvirtiéndose hace ese tipo de unidades”, agrega.

El presente de esta firma olavarriense también tiene en proceso la nueva planta fabril, la cual ya se está levantando sobre un predio de 12.000 m2. “Ya estamos montando la estructura –menciona Stoessel- y creemos que un año o en un año y medio estaremos produciendo en la nueva planta. En una primera etapa va a tener una superficie cubierta de 3.200 m2, y en una segunda etapa se le va a sumar un área de 1.200 m2 para albergar el área de pintura y el horno correspondiente. Estimo que en un plazo de dos años el proyecto va a estar terminado”.

Con un perfil netamente familiar, la firma está construyendo su propia red de comercialización. “Ya estamos trabajando en todo el país y de a poco, armando nuestra red. No es fácil, porque la base de nuestro trabajo es la confianza, nuestro trabajo es muy personalizado y en eso, la confianza es fundamental. No vendemos por vender y también, porque si bien tenemos alguna financiación bancaria, en una buena parte financiamos las ventas con nuestro propio esfuerzo”, señala Stoessel.

El uso de este nuevo material le ha permitido a Metalúrgica Stoessel hacerse un lugar en un mercado altamente competitivo, siendo uno de los primeros fabricantes de unidades volcadoras en producir con Domex. El esfuerzo de esta iniciativa, también fue acompañado por proveedores nacionales de insumos, los cuales también hacen a la calidad de los productos elaborados por esta empresa.

NG – 18 de junio 2013 / Redacción Expotrade