Joe Bento lleva 20 años en la industria de la logística y el transporte internacional. Llegó a la cabeza de Marketing de la transportista Eagle Global Logistics (EGL), después de ser el ejecutivo comercial que más ventas logró en la compañía. Luego fue nombrado presidente de EGL, y manejó la venta de la empresa a manos de lo que hoy es CEVA Logistics, un operador global que nació en 2006 tras haber adquirido otra rama clave de la logística mundial: TNT Logistics.
Hoy, Joe, es el presidente de CEVA para las Américas y del área Transporte Internacional. Ya sea por su nacionalidad norteamericana -que imprime una particular visión de los negocios al management de ese país- o por su naturaleza comercial, el optimismo que destila Joe en un momento de derrumbe total del comercio internacional es llamativo. Hasta irresponsable en cierto punto. Pero basta una hora de charla para que Joe convierta el páramo de la logística actual en un paraíso para esta industria de los servicios.
En Estados Unidos, el negocio logístico cayó entre un 15 y un 20 por ciento. "Se percibe la crisis. Puedes apostarlo. No hay volumen. Se frenó el negocio", reconoce, no sin cierto aplomo. Pero el tono cambia cuando habla del potencial de negocios en el sur del hemisferio.
"Creo que este negocio puede duplicarse en 2009 y hasta triplicarse en 2010", dispara Joe durante un almuerzo con LA NACION en el Faena Hotel. Vino a Buenos Aires por pocas horas para reunirse con los clientes locales (en su mayoría, filiales de multinacionales) antes de viajar a San Pablo, en uno de esos raides ejecutivos en los que las estadías en aeropuertos y las horas de vuelo igualan el tiempo pasado en tierra.
-¿Duplicar en 2009, triplicar en 2010? ¿Cómo es eso posible?
-Hay oportunidades en la crisis. No hay que olvidarse que tenemos un portfolio y un know how formado por un ex agente de carga internacional, EGL, una compañía de US$ 3200 millones, y a TNT Logistics, de casi 4000 millones. Es un excelente combo de servicios para ofrecerle al cliente. Nuestro énfasis es hacernos fuertes en América del Sur, donde los grandes jugadores, como DHL [Global Forwarding] y Kuehne + Nagel, no tienen tanta presencia. Vamos a enterrar nuestros dientes acá.
-Pero eso no responde a cómo harán para multiplicar los negocios.
-Por cómo está la situación económica, las empresas buscarán cada vez más tercerizar procesos, desde el almacenamiento hasta el manejo de los centros de distribución o tareas de ensamble o montaje liviano. Y nosotros tenemos soluciones para todo ello.
-Pero… ¿Y la recesión?
-Para nosotros, tiene el efecto opuesto. Las empresas van a tener que focalizarse como nunca en lo que saben hacer, y dejarán de lado la logística y el transporte en manos de expertos. Las licitaciones se van a duplicar.
Juan Ignacio Blanco, el hombre de CEVA en la Argentina, agrega durante la charla: "Hoy tenemos entre tres y cuatro veces más ofertas de licitación que hace seis meses. Los clientes no tienen más alternativa que buscar economía de escala. Las empresas integradoras de servicio, como la nuestra, crecieron entre un 20 y un 30% durante la crisis de 2001 y 2002".
-¿Qué piensa del mercado local, teniendo en cuenta que hace pocos meses se fue del país un jugador de la talla de Ryder?
-No conozco esa compañía muy bien. Vemos la oportunidad, la puerta abierta que dejan en un mercado de US$ 20 millones y estamos preparados para tomar esa parte. Vamos a aprovechar cada movimiento del mercado.
-¿Cuál es la participación que tienen hoy en el mercado local?
Blanco: -Es difícil de responder porque no hay buenas estadísticas locales y somos integradores: no es que hagamos sólo logística o sólo transporte.
Bento: -Sí, puedo decirte que estamos entre los cuatro jugadores mundiales [detrás de DHL Global Forwarding, Kuehne + Nagel y Schenker]. Los clientes no sólo buscan despachar un contenedor de Buenos Aires a Houston, sino saber que tienen a alguien que les administrará el depósito en destino, le va a completar todo el papeleo y distribuirá finalmente el producto en Estados Unidos. Nuestro servicio es un paquete de servicios. Ese es el valor agregado: cubrir el ciento por ciento de la cadena de abastecimiento.
-¿Están evaluando posibles compras de empresas locales?
Blanco: -No podemos dar nombres, pero en noviembre último estuvimos involucrados en un due diligence [análisis profundo de una empresa, con su consentimiento, por parte de un adquirente que demostró intenciones de compra] de un operador logístico local.
-¿Ven como oportunidad la compra de buques en un momento en el que se multiplican los barcos fondeados sin uso comercial?
-No somos dueños de buques. Es cierto que los precios [de los fletes] cayeron mucho y es un momento de negociación muy fuerte. Pero como Nvocc [non vessel operating common carrier, es decir, transportista que no explota buques], el de los buques no es nuestro negocio. Preferimos gastar nuestro dinero en adquisiciones o en actualizaciones tecnológicas.
-¿Qué comentarios tiene respecto del ambiente de negocios en la Argentina?
-[Risas]. Bueno, es un lindo lugar para venir. Parece un buen lugar para hacer negocios. Para los negocios de mi compañía, va en dirección opuesta a los Estados Unidos. No conozco mucho de política interna. ¿Usted qué cree? ¿Es bueno el ambiente de negocios aquí?
-[…]
-¿Y si el gerente local lo llama y le pide US$ 50 millones para invertir en el país?
-[Risas]. ¡Le preguntaría primero para qué! ¡Pero sería mucho dinero! Si está buscando un negocio inmobiliario para un gran centro de distribución vería la posibilidad de darle US$ 20 millones, si vale la pena el riesgo.