30 años al servicio de los profesionales

Citroën Jumper, sucesor del TUB y Type H, cumplió tres décadas de evolución al servicio del transporte profesional.

 

Este año, con un diseño totalmente renovado y una cabina confortable y tecnológica, suma la mayor capacidad de carga de su categoría.


Desde 1994, las distintas generaciones de Jumper han puesto la innovación al servicio de todos los profesionales, desde los artesanos hasta las grandes flotas de carga, con el objetivo de mejorar el confort del conductor y el rendimiento de la empresa.
Citroën Jumper ha respondido constantemente a las expectativas de los profesionales al proporcionar robustez y diseño inteligente, permitiendo la optimización de cada metro cúbico de volumen de carga, acomodando una carga útil de referencia y ofreciendo una amplia variedad de configuraciones para proporcionar una solución a medida para cada usuario.
Un modelo con todas las fortalezas para inaugurar una cuarta década de éxitos en el segmento de las furgonetas, junto con una nueva forma de atender al profesional que tiene en su vehículo una herramienta cotidiana de trabajo.
Desde hace casi 100 años, Citroën apoya a todos los profesionales con una gama de vehículos industriales robustos e innovadores. Esto es particularmente visible en el segmento de las furgonetas con modelos como el TUB, un pionero de los vehículos utilitarios modernos, el Type H, el reconocido C25 y Jumper, que celebra hoy su 30 aniversario.

 

 

Cuando se presentó en enero de 1994, Citroën prestó especial atención al interior con una ergonomía similar a la de un sedán, un aislamiento acústico mejorado y características inéditas para una furgoneta, como levantavidrios eléctricos y aire acondicionado.
Por supuesto, el nuevo Jumper no se olvidó de satisfacer las necesidades esenciales de todos los profesionales con una amplia gama de motores (nafteros y diésel) y configuraciones de carrocería, lo que da como resultado un total de 58 versiones diferentes del Jumper.
A principios de la década de 2000, Jumper evolucionó con un diseño renovado y, lo que es más importante, la adopción de dos motores de última generación: el motor turbodiésel de inyección directa 2.2 HDi y el motor naftero/GLP de doble combustible 2.0i. El Jumper también innovó en cuanto a prestaciones, siendo el primero de su segmento en ofrecer un asiento del conductor con amortiguación variable, cámara o radares traseros.
Continuando a la vanguardia, Jumper recibió todo lo moderno a mediados de la década de 2010: luces diurnas LED, una pantalla táctil con sistema de navegación integrado, una caja de conexión con manos libres Bluetooth y USB, advertencia de cambio de carril y un sistema Stop & Start en sus motores e-HDi para una ganancia de consumo de 0,5 litros/100 km en ciudad.

 

 

La nueva Jumper
Este año, con un diseño totalmente renovado y una cabina confortable y tecnológica, suma la mayor capacidad de carga de su categoría. Más capacidad de trabajo es también más seguridad: ofrece de serie Control de Estabilidad y Tracción (ESP), Limitador y Control de Velocidad Crucero y Ayuda al arranque en pendiente. El moderno motor Diésel 2.2 HDi de 130 CV se combina con una caja manual de seis velocidades.
La cabina para tres pasajeros garantiza el confort propio de un vehículo de su categoría: 13 espacios para guardar objetos de distintos tamaños, levantavidrios delanteros eléctricos, regulación en altura para el asiento del conductor, aire acondicionado, dirección asistida y sistema de audio con Bluetooth y comandos al volante, MP3 y entrada auxiliar USB.
Una ergonomía moderna e intuitiva permite enfrentar jornadas de trabajo intenso sin temor al cansancio o la fatiga.