Los empresarios del autotransporte de cargas tienen “una posición muy firme” de no otorgar aumentos salariales a los camioneros, debido a la fuerte caída de la actividad que oscila entre un 30 y un 50 por ciento, afirmó hoy el representante del sector patronal en las negociaciones paritarias, Lucio Zemborain. Escuche la entrevista.
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“Llevamos a la primera reunión en el Ministerio una posición muy firme, fundada en las razones económicas que están atravesando las empresas del sector. Esta situación se contrapone con el reclamo sindical de un incremento del 25 por ciento, y hace imposible pensar en un próximo acuerdo”, explicó Zemborain en declaraciones a Radiotransporte.
El dirigente, que se desempeña como director de Asuntos Laborales de la Federación de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (FADEEAC), relativizó la falta de acuerdo en la primera reunión paritaria cumplida el miércoles último, y evitó pronunciarse sobre si el pedido del 25 por ciento es excesivo.
“La verdad es que no nos pusimos a elucubrar previamente qué porcentaje nos iban a requerir, en función de que las posibilidades económicas del sector no están para hacer ningún tipo de modificación”, dijo, y ante la pregunta de si la oferta de patronal se mantiene en un aumento del “cero por ciento”, respondió: “en este momento sí”.
Añadió que en los últimos seis años el sector empresario “otorgó aumentos salariales por encima de la media de otras actividades, colocando las remuneraciones de los trabajadores camioneros entre los mejores pagos del país, cosa que reconoce el propio sindicato”.
En ese sentido, añadió que si los empresarios del autotransporte “ahora no puede otorgar aumentos salariales, es sencillamente porque la rentabilidad y la ecuación económico financiera de las empresas lo impide”.
“Tratemos de sobrellevar ¬juntos, empresarios y trabajadores, este difícil momento, para preservar los puestos de trabajo y la continuidad de las empresas”, expresó Zemborain, al tiempo que consideró hablar de medidas de fuerza desde el sector gremial “es la práctica usual de este tipo de negociaciones”.
“El arma que tienen los trabajadores y las organizaciones sindicales que los representan es adoptar medidas de fuerza cuando la posición del sector empresario no los complace. Lo que pasa es que la realidad económica no nos deje la posibilidad de hacer una mejora económica a pesar de que haya una, dos o mil medidas de fuerza”, enfatizó.
El representante patronal dijo que una presión de este tipo “no va a cambiar el ánimo de los empresarios, que tienen una posición unánime en función de las dificultades económicas que están atravesando”.
Fuente: Radiotransporte
