Control parlamentario sobre la Hidrovía

El Senado sancionó, por unanimidad, la creación de una Comisión Bicameral para el seguimiento de la licitación del curso Paraná-Paraguay.

 

El proyecto permitiría un monitoreo, auditoría y contralor del proceso licitatorio.


El proceso de licitación de la hidrovía Paraná-Paraguay sería controlado por el Congreso de la Nación, luego de que el Senado de la Nación aprobara, por unanimidad, una ley para crear una Comisión Bicameral de Seguimiento y Control del proceso licitatorio del curso por el que se transporta 80% de las exportaciones del país.
Según el proyecto de la senadora santafesina María de los Ángeles Sacnun, del Frente de Todos, que todavía deberá pasar por Diputados para convertirse en ley, el cuerpo de control legislativo estará compuesto por seis miembros de cada Cámara, lo que le dará al Congreso potestad para observar cualquier decisión del Gobierno sobre esa vía fluvial.
Si bien, durante el interinato de Gabriel Katopodis en el Ministerio de Transporte, se prorrogó por 90 días la concesión al consorcio de Gustavo Romero y la belga Jan De Nul, luego se podría concretar una nueva licitación o, como propusieron algunos sectores, que la gestión de la Hidrovía sea asumida por el Estado.

 

Alcances
El proyecto permitiría un monitoreo, auditoría y contralor del proceso licitatorio de la Hidrovía Paraguay-Paraná y del sistema de Navegación Troncal, «de las inversiones necesarias para el desarrollo integral de las regiones y cuestiones conexas vinculada al transporte, la integración, el crecimiento económico y el desarrollo productivo».
También, prevé que la bicameral pueda «hacer informes con propuestas concretas y asesorar sobre su avance, haciendo especial énfasis en el desarrollo armónico de la Nación, el respeto al federalismo, el desarrollo de las economías regionales y el cuidado del medio ambiente».
En esa línea, se prevé que tiene la capacidad de «auditar las inversiones, costos y gastos que se desprendan de la licitación de la Hidrovía» y además «ejercer el contralor del proceso licitatorio», lo que además abre una puerta al dragado del Canal Magdalena que reclama la provincia de Buenos Aires.