“El futuro del sector es muy alentador”

Más inversiones, empleo, tecnología y desarrollo inmobiliario fueron algunas de las claves que señaló Juan Calvo, director comercial de Grupo Logístico Andreani, para el crecimiento del país.

 

Es fundamental una logística que esté inserta desde los procesos productivos y hasta los procesos de consumo

 

El escenario logístico después de 2020 ya no es el mismo. Algunos cambios son parte del pasado reciente, pero algunos están en marcha y otros esperan su turno en una agenda en la que convergen diferentes intereses y prioridades.
A fin de profundizar sobre algunas de estas transformaciones de la actividad y qué perspectivas o necesidades se abren para 2021, Info Transporte & Logística entrevistó a Juan Calvo, director comercial de Grupo Logístico Andreani.

 

¿Cuál es su balance sobre el nivel de actividad que tuvo la logística durante 2020?
La pandemia hizo que se visibilizara enormemente la relevancia de la logística por ser una actividad considerada esencial que posibilitó el abastecimiento del país, la continuidad de las actividades económicas y la articulación de campañas solidarias de ayuda en la emergencia.
Si bien previo a la pandemia las empresas productoras o intermediarias ya eran conscientes de la importancia de la supply chain, este año contribuyó a demostrar que la logística no es meramente transporte y almacenamiento, sino que es algo mucho más complejo que implica, por ejemplo, la capacidad de gestión ágil y eficiente de flujos de información, aspectos de mucho valor competitivo para ellas.
Además, los nuevos hábitos de consumo y las diferentes realidades y posibilidades de las industrias, hicieron que la logística se volviera, por un lado, mucho más visible y presente en la vida cotidiana de las personas y, por el otro, que se convirtiera en una aliada estratégica para miles de pymes y grandes generadores de carga de productos esenciales para poder subsistir y salir adelante.

 

En el contexto de la pandemia, ¿cuáles fueron los principales cambios que impactaron en el sector?
Sin dudas, el boom del e-commerce aceleró el crecimiento del sector de manera exponencial. En esta nueva configuración de los modos de consumo, como comentaba, a raíz de la pandemia se visibilizó como nunca antes el rol estratégico de la actividad logística.
Pero la logística no sólo jugó un rol crucial en la sostenibilidad de muchos negocios, sino también en el abastecimiento de insumos críticos. Y ese crecimiento en la ponderación de la actividad no fue percibido únicamente por los productores y consumidores, sino también por los gobernantes, que contemplaron el diálogo con el sector para establecer las reglas de tránsito en las rutas, cómo entrar o salir de una ciudad, entre otros aspectos relevantes en el escenario desconocido y volátil que planteó la pandemia. Esa articulación entre el Gobierno y las federaciones y cámaras de logística permitió destrabar con celeridad decisiones a niveles municipales y provinciales. A su vez, el sector logístico se consolidó como motor económico y social: una actividad de mano de obra intensiva, que generó empleo en todos los niveles ante un contexto tan adverso.

 

¿Qué opinión tiene sobre el desempeño que cumplió la actividad durante 2020?
El desempeño del sector fue destacable, teniendo en cuenta la capacidad de adaptarnos velozmente a la “nueva normalidad”. El año pasado nos desafió a realizar un enorme esfuerzo para cumplir con la responsabilidad de liderar una actividad esencial que no puede ponerse en pausa, en un contexto de gran complejidad e incertidumbre.
Tuvimos que actuar de manera ágil para readecuar nuestras operaciones y hacer frente al gran volumen de trabajo, cumpliendo con los indicadores de calidad y las expectativas en las entregas, priorizando siempre el cuidado de la salud de nuestros colaboradores y de todas las personas a las que llegamos cada día, y cumpliendo con los protocolos necesarios para asegurar la continuidad de la actividad.

 

¿Cuáles son los temas pendientes que tiene la logística a futuro?
El crecimiento exponencial del comercio electrónico que tuvo lugar en 2020 y la demanda de servicios logísticos necesitarán de más y mejor infraestructura. Esto implica mayores inversiones, empleo, tecnología y desarrollo inmobiliario en el país. El futuro del sector es muy alentador y esto tendrá impacto en toda la cadena de valor con saldo positivo para el consumidor.
El principal objetivo será tomar decisiones con la mirada centrada en las personas. Hoy los consumidores deciden cuándo, cómo y dónde comprar, y la exigencia de inmediatez en las entregas es cada vez más relevante en la experiencia de los destinatarios y de los productores, que quieren que su mercadería esté disponible en cualquier lugar, de manera rápida y a bajo costo de inventario. El futuro de los dadores de carga y de los operadores logísticos estará condicionado por esa capacidad de profundizar el foco en el consumidor.
Para que eso suceda, es fundamental una logística que esté inserta desde los procesos productivos y hasta los procesos de consumo, ya que una logística sin planificación resulta ineficiente. Siguiendo con la eficiencia, y ante hábitos y expectativas cada vez más demandantes, el desarrollo de tecnología para predecir comportamientos de consumo es muy relevante, al agilizar los flujos y generar ahorros de tiempos y dinero.
De cara al futuro será cada vez más importante generar inversiones que potencien el valor competitivo de los clientes: enfocadas en la automatización, tecnologías, trazabilidad y la transparencia en los envíos, tanto para el cliente como para el destinatario. También en infraestructura propia, mejoramiento de las rutas, incentivo y promoción a los parques logísticos, puntos de cercanía, vehículos cada vez más eficientes desde lo ambiental como desde la seguridad vial, y en la propuesta de empleabilidad para la atracción de talentos hacia las compañías del sector.

 

¿Qué expectativas tiene para 2021?
Vislumbramos un año en el que tendremos que seguir haciendo un esfuerzo importante como sociedad. Y en ese sentido, el sector logístico tiene mucho para aportar tanto en el ámbito de la salud –con la distribución de medicamentos y vacunas- como en el desarrollo económico del país, apalancando desde un lugar estratégico el funcionamiento de grandes empresas, pymes y emprendedores. La logística no se trata sólo de optimizar el transporte, el almacenamiento o los flujos de información, sino de tener una mirada global y dar la mejor solución a cada una de las partes involucradas. Porque es posible mejorar los distintos procesos del que produce, el que vende y el que compra.

 

 

Motores encendidos
Juan Calvo afirmó que desde Grupo Logístico Andreani la expectativa es seguir creciendo e invirtiendo en el país. En el bienio 2020-2021 la compañía invertirá 60 millones de dólares en software, nuevas plantas, sucursales, vehículos, clasificadores de mercadería y tecnologías de automatización de procesos. Además, pondrá un especial foco en desarrollos inmobiliarios, entre ellos Norlog. En definitiva, apostamos a que la logística sea uno de los motores de la recuperación.
“Pondremos también especial foco en el desarrollo de soluciones logísticas integrales para la industria farmacéutica, sector que lideramos hace 40 años, con una capacidad para distribuir 400 millones de medicamentos por año”, agregó el directivo, y destacó el interés de continuar trabajando para tener un impacto positivo en temas ambientales.