Por Susan Boragno
Para Li NACION
Al tomar la ruta Panamericana desde la avenida General Paz se puede observar un cartel que la designa como autopista Ingeniero Pascual Palazzo. Es oportuno recordar a este profesional, ahora que se cumplen 23 arios de sufallecimiento. Su trayectoria amerita el reconocimiento por la magnitud de sus obras, por la trascendencia internacional de sus trabajos y por la escuela que formO en la catedra.
Se graduo en la Universidad de Bue¬nos Aires (UBA) con diploma de honor en 1915, ario en el que inicia sus primeros trabajos en el campo del transporte, donde se especializo en el diserio geometric° de vias de commicaciOn. Durante 20 arios proyecto las primeras estructuras de puentes de la provincia de Buenos Aires. En 1925 proyectO el
Puente suspendido y rigid° de estructurametalica sobre el rio Quequen Gran¬de, con tres tramos que cubrian un total de 260 m divididos en uno central de 150 m y dos laterales de 60 m. El gobierno de la provincia lo comision6 para que supervisara su construccian en la cornpariia Chantiers et Atelier de la Giron¬de de Francia. Finalmente dirigio su instalaciOn entre 1926 y 1927.
Cuando se sanciono la ley N° 11.658 de vialidad nacional, se reclamo a las grandes figuras thcnicas del pais, Pa¬lazzo entre ellas. El ingeniero proyecto entonces las primeras arterias urbanas de la ciudad, entre las cuales estuvo la avenida General Paz. Varios trabajos originales del ingeniero obtuvieron juicios consagratorios en el exterior, como su Plan de Red Arterial, que merecio un estudio del colega italiano Albertini, auto», de un plan regulador para
Participo tambien en los problemas urbanisticos, aconsejando la conveniencia de formar poblaciones satelites como una solucion a la necesidad de lograr una red de distibucion de transit°. En 1930, se ocup6 del trazado del camino LujanMercedes. Y en 1936, asumi6 la jefatura del proyecto de la avenida General Paz, cargo que le permitird realizar una obra de avanzada
en el pais y desarrollmr las normas de trazado para el diserio geometric° de los caminos. El ingeniero Palazzo decia: «La funcion del camino no culmina con su uttlizacion como superficie de circulacion sino como una cuestiOn de alcance cultural […] que se prolonga en consecuencias espirituales creando lugares de bienestar […]; supercepciOn produce al observador una reacciOn emocionar.
Palazzo sustentaba la tesis «un camino de red troncal no debe cruzar zonas pobladas», principio adoptado en el pais despues de largas controversias. Incorpor6 el concepto de » velocidad directriz» de maneratal que los elementos que integran el trazado permiten circular a esa velocidad con absoluta seguridad. Enuncio una famosa frase: «El ingeniero es aquel que puede hacer por un peso lo que el profano hace por dos».
Fue profesor de Vias de ComunicaciOn entre 1940 y 1952 en la Facultad de Ciencias Exactas, Fisicas y Naturales,
y profesor titular de la catedra de Planeamiento y Urbanismo entre 1958 y 1965, de la Facultad de Ingenieria. Los apuntes editados en 1947 todavia tienen vigencia y son utilizados por los actuales alumnos que absorben sus enserianzas.
En 1952, por desacuerdos con el go bierno, se aleja de sus actividades
y universitarias. Cuando asumiO el cargo de interventor de Vialidad Nacional en 1955 dijo: «Los hombres de Vialidad no pudieron impedir que los resortes se aflojaran, que los miembros se debilitasen y que la otrora orgullosa estructura vacilase». El ingeniero Palazzo fue fundamentalmente un senor, y sus gestiones estaban desemperiadas en un marco de seriedad y dignidad.
De todos los ambitos publicos y privados se levantaron voces para recordar la figura de un hombre recio, de porte viril, de gesto severo, atemperado por una cordial sonrisa, de trato amable y cortes, parco en palabras pero preciso en sus conceptos, de presencia tan silenciosa como trascendente.
E114 de enero de 1981, el Poder Ejecutivo dispuso por decreto N° 17 que el tramo del Acceso Norte entre la avenida General Paz y la interseccion con el Ramal a Garin se denominara Ingeniero Pascual Palazzo por sus relevantes servicios prestados al pais, tras unas largas y eficientes actuaciones en la enserianza universitaria y en la fundon publica.
Palazzo falleciO el 11 de mayo de 1980 a los 89 afios. Decia LA NACION el 13 de mayo de 1980: «Activo hasta el Ultimo aliento, el ingeniero Palazzo, funcionario de extensa trayectoria y tecnico de reconocidos valores supo sumar a lo largo de toda su existencia amistades cuyo testimonio se repitio en su sepultura en la Recoleta».
La autora es historiadora especializada en transporte vial y ferrovierio. Email: susanaboragno@fiberteLconsar