A los dueños de estaciones de servicio no les basta con el aumento de precios de los combustibles dispuesto por las petroleras. Se quejan de que reciben sólo el 7% de las nuevas alzas (de hasta el 5,5%) y alegan que su rentabilidad sigue dañada. Recuerdan el cierre de numerosas bocas de expendio en los últimos años y advierten que volverán al paro, como en 2008.
La presidenta de la Federación de Empresarios de Combustibles (Fecra), Rosario Sica, dijo ayer que si el ministro de Planificación, Julio De Vido, no da una respuesta a sus reclamos, la comisión directiva de la entidad decidirá en la reunión de la semana próxima si se convoca a una huelga de comercialización.
Fecra ya organizó un paro de 24 horas en 2008 y pensaba repetirlo en Año Nuevo, pero lo suspendió por pedido de De Vido, que por entonces recibió a Sica. El ministro le prometió una solución al problema de la rentabilidad y le propuso definir propuestas con técnicos de la Secretaría de Energía, sin la intervención del secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, según el relato de la jefa de Fecra. Las propuestas ya fueron elevadas a De Vido, que todavía no respondió. Por eso, Sica vuelve a amenazar con un paro, aunque admite que organizarlo llevará tiempo y que aún falta determinar si el sindicato del sector adherirá.
A los expendedores no les conforma el aumento que anteayer aplicaron YPF y Petrobras. Fuentes de la petrolera hispanoargentina admitieron un alza de hasta el 5,5% en el valor del litro de nafta súper, que llegó a $ 2,79 en la Capital Federal. Durante casi todo el gobierno de Néstor Kirchner y hasta principios de 2008, costaba sólo 1,90. Es decir, aumentó 46,8% desde entonces.
En YPF destacan que la súper, que en dólares cuesta US$ 0,75, aún está más barata que en Brasil, donde vale US$ 0,97. En los dos países hay quejas contra las petroleras porque los combustibles se encarecieron cuando el año pasado el barril de crudo orilló los US$ 150, pero no se abarataron ahora que perdió dos tercios de su valor.
En Petrobras no confirmaron los aumentos, pero sus estaciones de servicio reconocieron que remarcaron el mismo día que YPF. En el local de la avenida Santa Fe y Agüero pusieron la nafta súper a $ 2,799; la premium, a 3,299, y el gasoil, a 2,009.
En Shell hasta ayer no se habían retocado los precios, que de por sí ya eran mayores que los de la competencia e incluso siguen siéndolo en algunos productos. La estación de Figueroa Alcorta y Mariscal Castilla y la de Av. del Libertador y 9 de Julio ofrecían la nafta súper a $ 2,799; la premium, a 3,299; el gasoil normal, a 2,299, y el premium, a 2,899. Pero fuentes de la petrolera angloholandesa admitieron que están evaluando el mercado para resolver los pasos por seguir. Además, el presidente de Shell, Juan José Aranguren, declaró a la agencia DyN que "las variaciones porcentuales de precios que se están produciendo compensarían parcialmente la devaluación del peso en relación con el dólar registrada en los últimos meses".
Esso iba a aumentar ayer los precios, pero el feriado retrasó las remarcaciones. En la boca de expendio de Las Heras y Agüero se vendía la nafta súper a $ 2,659; la premium, a 3,195, y el diésel, a 1,959.
El director de Asuntos Públicos de la compañía norteamericana, Tomás Hess, señaló que, "ante la suba del dólar frente al peso y la dificultad para exportar por los altos impuestos que gravan los productos del sector, las petroleras debieron aumentar los precios". Añadió que "exportar los valores excedentes de la producción, que era la válvula de escape [ante los bajos precios locales en comparación con los mundiales], hoy no es conveniente porque los impuestos a la exportación son sumamente altos". Esso y Shell no producen petróleo en la Argentina sino que lo compran a otras firmas y lo refinan.
El representante legal de Consumidores Libres, Héctor Polino, presentará una queja ante la Secretaría de Energía: "No existe ninguna razón que justifique los aumentos porque el argumento del alza del dólar no tiene fundamento, ya que el petróleo se extrae de las entrañas del suelo argentino y a costos de la Argentina".
Fuente: La Nación
25 – 03 – 09
MT
