Lenta recuperación de la carga aérea

Los envíos aéreos comenzaron a retomar sus niveles tras los efectos sufridos por la pandemia, aunque limitados por la falta de bodega en vuelos de pasajeros.

 

Las aerolíneas latinoamericanas informaron que la demanda se mantuvo estable en 26,1% negativo.


Los mercados mundiales de carga aérea en agosto continuaron mejorando lentamente, en medio de una capacidad insuficiente, donde la demanda siguió moviéndose levemente en una dirección positiva mes a mes; sin embargo, los niveles siguieron deprimidos en comparación con 2019, según informó este martes la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA).
La mejora continuó a un ritmo más lento de lo que sugerirían los indicadores previos, debido a la limitación de capacidad por la pérdida de espacio disponible para carga en bodega mientras los aviones de pasajeros permanecen estacionados.
La demanda mundial, medida en toneladas-kilómetro de carga (CTK), fue 12,6% inferior a los niveles del año anterior en agosto (-14% para las operaciones internacionales), lo que fue una modesta mejora con respecto de la caída interanual de 14,4% registrada en julio. La demanda desestacionalizada creció 1,1% intermensual en agosto.
La capacidad global, medida en toneladas-kilómetro de carga disponible (ACTK), se redujo 29,4% en agosto (31,6% para operaciones internacionales) en comparación con el año anterior. Básicamente, se mantiene sin cambios desde la caída interanual del 31,8% en julio.
La capacidad de bodega para carga aérea internacional estuvo 67% por debajo de los niveles de agosto de 2019 debido a la retirada de los servicios de pasajeros en medio de la pandemia Covid-19.
Eso fue parcialmente compensado por un aumento del 28,1% en la capacidad de carga dedicada. La utilización diaria de cargueros de fuselaje ancho es cercana a las 11 horas diarias, los niveles más altos desde que se registraron estas cifras en 2012.
En tanto, las aerolíneas latinoamericanas informaron que la demanda se mantuvo estable en 26,1% negativo en comparación con el año anterior, poniendo fin a tres meses consecutivos de demanda en deterioro, según el informe de IATA.
La demanda de rutas comerciales entre América Latina (particularmente América Central) y América del Norte ha compensado la debilidad en otras rutas. La capacidad sigue estando muy restringida en la región, con una capacidad internacional disminuyendo 38,5% en agosto, la mayor caída de cualquier región.