Redrado irá a la UIA a aplacar temores por el pacto con China

 

Los industriales temen una invasión de productos asiáticos facilitada por el gobierno de Pekín

Sin proponérselo, sin levantar siquiera el teléfono, Juan Carlos Lascurain, presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), recibió ayer tres llamadas de funcionarios nacionales, en este orden: Arnaldo Bocco, director del Banco Central; Débora Giorgi, ministra de la Producción, y Martín Redrado, presidente del Central. Los tres intentaban tranquilizarlo por lo mismo: que el acuerdo con China de intercambio de monedas por 10.200 millones de dólares anunciado anteayer no significaría una inundación de productos asiáticos en la Argentina porque era una transacción financiera, no comercial.

Los industriales seguían anoche inquietos. En el encuentro en que se ratificaba a Héctor Méndez como próximo presidente de la UIA reinaba la confusión. "Acá nadie entiende nada y hay un malestar importante ?confesó a La Nacion, desde la reunión, uno de los dirigentes?. Todos lo vieron como una apertura a China."

Redrado le dijo a Lascurain que los medios lo habían interpretado mal. Que se trataba sólo de una transacción de swap (intercambio) entre los bancos centrales de ambas naciones para fortalecer reservas. Y envió a la UIA un breve texto que aclaraba que la operación no tenía nada que ver con lo que se había hecho con Brasil (la eliminación del dólar como moneda de transacción) y que incluso estaba dispuesto a ir a la sede fabril para explicarlo.

Giorgi también llamó a Osvaldo Cornide, presidente de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), que estaba en Punta del Este. Le dijo que estudiaría el memorándum de Redrado y que, si perjudicara a los fabricantes nacionales, no sería aprobado. Lo había hablado por la mañana, agregó Giorgi, con la presidenta Cristina Kirchner. Las dudas de Cornide: "Si el país los toma para fortalecer las reservas, está bien; si esto implica una inundación, es un desastre ?dijo a La Nacion?. No sé por qué China nos prestaría sin una contraparte. Detrás de una política de esta naturaleza tiene que haber una intención".

La Argentina le vendió el año pasado a China por 6600 millones de dólares y le compró por 7100 millones. El déficit se instaló por la baja de exportaciones provocada por el conflicto agropecuario: habían sido 5360 millones de ventas y 5120 millones de compras en 2007.

De ahí la preocupación del Gobierno. Redrado volvió a hablar ayer en Medellín, donde participó de la Asamblea Anual del BID. "Es una operación financiera. Luego veremos cómo se usa [el dinero intercambiado]", dijo, y aclaró que la Argentina no necesitaba ahora los recursos chinos: "Con el swap, el país entrega y recibe monedas por un período de hasta tres años. Pero es contingente. Lo que buscamos es dar una señal".

Algunos empresarios confían. "Yo no tengo miedo ?dijo el textil Teodoro Karagozian, de TN Plátex?. Esta una medida de Redrado, no de Giorgi, ni de todo el Gobierno, que es consciente de que hay que generar empleo. Es una jugada inteligente desde el punto de vista financiero: es más lógico tener respaldo en yuanes que en dólares; Estados Unidos está emitiendo y la reserva de valor debe ser más fuerte."

 

Optimismo de importadores

Lo que no estaba claro ayer aún era si el Banco Central, en caso de recibir los 70.000 millones de yuanes, podría venderlos a los importadores argentinos que quisieran comprar productos chinos. O si el Banco Popular de China podría usar los 37.000 millones de pesos que recibiera a cambio, a la paridad actual, para venderlos a los empresarios chinos que adquirieran, por ejemplo, soja embarcada en los puertos de Santa Fe.

 

El estado de alerta industrial contrastó con el optimismo de importadores y comerciantes. "No creo que este acuerdo impulse el comercio con China, pero lo va a facilitar" ?dijo Diego Pérez Santisteban, de la Cámara de Importadores?. Es una práctica muy conocida en el comercio exterior: se llama crédito comprador, les da a las operaciones un costo financiero mejor."

Carlos de la Vega, de la Cámara Argentina de Comercio, también mostró satisfacción. "Que le presten a la Argentina me parece fenómeno ?dijo?. Con la crisis, todos los países aplican algún tipo de restricción de las importaciones. La Cámara Argentina de Comercio siempre ha solicitado que estas medidas se adopten mediante reglamentaciones transparentes."

 

Fuente: La Nación

01 -04 – 09

MT