Cobrar reintegros, misión imposible

Los retrasos en reembolsar derechos de exportación exceden los seis meses como mínimo. Los empresarios del vino se quejan, además, por demoras en el recupero del IVA y la falta de crédito.

Más allá de la crisis internacional que azota a todos los mercados, Argentina enfrenta un enemigo interno. El Estado, según los empresarios vitivinícolas, mira hacia las elecciones dejando saldos pendientes. Entre ellos, la demora en los reintegros por exportaciones, que consiste en un porcentaje sobre el valor FOB de la mercadería nacional exportada del 6% para el vino fraccionado y del 5% para el mosto.

Según datos aportados por Mariano Chaud, gerente de Finanzas de Trivento, y extraídos de la AFIP, el Estado transfirió en reintegro a las exportaciones en enero de 2008, $300 millones, y en el mismo mes de este año el monto sólo fue de $100 millones, mientras que en febrero del año pasado la AFIP entregó $ 200 millones, y en el mismo mes del 2009 el monto fue "cero".

Juan Carlos Pina, gerente de Bodegas de Argentina, dijo a FINCAS que "a nivel nacional, según la Cámara de Exportadores de la República Argentina, se estima que a febrero el Estado adeuda alrededor de $ 600 millones a todos los productores del país en concepto de reintegros".

Según Pina esta realidad se vive desde hace mucho tiempo: "La demora era de 30 a 60 días, pero hace seis meses que no sale absolutamente nada".

"La entidad, desde diciembre reclama, pero hasta ahora ha sido en vano", explicó. A su vez dijo que hay algunas empresas vitivinícolas que están sufriendo retrasos de hasta ocho meses. "Antes había mayor fluidez y flexibilidad en los reintegros, en cambio ahora a algunas empresas se les junta entre reintegro de exportación y devolución del IVA, más de dos ó tres millones de pesos. Esto hace que los establecimientos pierdan competitividad, ya que esa plata que les falta la podrían utilizar para capital de trabajo, uno de los reclamos más fuertes de la industria".

Por su parte, Andrés Belinsky, Export Manager de Terrazas de los Andes, Cheval des Andes y Bodegas Chandon, indicó que "desde hace seis meses que no nos devuelven el porcentaje de derecho a exportaciones. Debido a esto no podemos seguir invirtiendo; además uno cuenta con ese dinero para pagar a proveedores de insumos, servicios, y lo que sucede es que la cadena de pagos se alarga cada vez más, generando mayores conflictos".

Mariano Chaud, agregó que "estos retrasos que estamos viendo se deben a que la caja del Estado se achicó. Las razones de esto es que los precios de los commodities han caído y hay una disminución en las exportaciones, de esta manera la recaudación es menor que la inflación". Mientras que destacó que el factor principal se debe a las elecciones. "El Gobierno está mirando al 28 de junio, y antes de pagar las deudas con las empresas en reintegros, va a destinar ese dinero a la campaña política. No veo grandes cambios antes de esa fecha".

 

A todos por igual

Esta realidad toca a todos por igual ya sea una empresa chica, mediana o grande. Juan José Canay, gerente de Exportaciones de Bodegas Trapiche, comentó que la empresa dejó de recibir los reintegros en agosto. "El Gobierno ha caído en default. La caja de la Nación cada vez es más chica y lo poco que tiene lo va a destinar a la campaña. Es muy preocupante, ya que para una empresa este es capital circulante, que si no lo tiene no lo va a tomar del banco, debido a que las tasas son muy altas". Agregó que "debemos seguir trabajando con una inflación que nos va comiendo, con un cambio que no nos favorece y ahora le metemos este costo adicional. Estamos perdiendo competitividad, esto que nos pasa, no le sucede a Australia, Chile o Nueva Zelanda".

Mario Albanez, contador de la Bodega Crotta, comentó a FINCAS que en los últimos dos años el Estado se viene retrasando  al menos entre 6 y 12 meses, en los pagos. "Esta situación de caja y redistribución presupuestaria, no creo que se solucione al corto plazo. Esto nos perjudica debido a que nosotros pagamos un derecho de exportación al ingresar las divisas y, los costos altos y la rentabilidad acotada en la venta de nuestros productos al exterior, hace que ese pequeño beneficio que nos da el Estado Nacional, para que amortigüemos de alguna manera el escaso margen de rentabilidad que tenemos hoy, no exista".

 

deNeXos

MT – 17 /04 /09

Fuente: Los Andes