Conocimiento y productividad

Las últimas tecnologías van a terminar con algunas profesiones, aunque también ayudará a crear nuevas.

Hay actividades repetitivas que a futuro podrían ser reemplazadas por robots.


“El mundo ha demostrado una capacidad muy grande de adaptación e incorporación de nuevas tecnologías, porque en general crean valor. Es verdad que se destruyen empleos, pero la historia demuestra que también se crean nuevos y el empleo total crece. Se trata de administrar las tensiones sectoriales mientras los vientos de cambio van moldeando las nuevas reglas de juego”.
Esa fue la observación de Diego González, miembro de la Comisión Directiva de la Asociación Argentina de Logística Empresaria (Arlog), quien consideró la automatización de procesos “incrementa la productividad y reduce los tiempos de ciclo, es decir mejora el servicio, a la vez que mejora la precisión y la calidad” y precisó: “La logística física es una actividad cada vez menos mano de obra dependiente a medida que la productividad y la robótica se incrementa”.
“Un impacto importante se observa en los proyectos que desafían los modelos tradicionales de las empresas de transporte, donde la clave es la gestión de una flota propia de vehículos. Los nuevos modelos son desestructurados y sin flota propia donde la clave es el desarrollo de aplicaciones que conectan a dadores de carga con transportistas, logrando costos muy competitivos y alta disponibilidad”, consideró González.
El profesional insistió en que se debe entender que se inició la segunda etapa de la revolución digital, donde el enfoque será convertir la información en conocimiento. “El conocimiento es lo que aumenta la productividad”, aseguró.
Reconoció que “muchos puestos de trabajo van a desaparecer. Por ejemplo, empresas que comercializan productos por e-commerce necesitan menos personal administrativo para responder preguntas on line: aplicando machine learning, es posible que el sistema aprenda y responda las preguntas de los usuarios sin intervención humana”.
González sostuvo que “a diferencia de lo que ocurrido en las revoluciones industriales anteriores, esta destrucción no va a afectar solamente a las clases menos capacitadas, también va a generar destrucción en los sectores más calificados, como abogados, médicos, farmacéuticos”.
“Hay actividades repetitivas, como el picking de pedidos o el conducir un vehículo, que a futuro podrían ser reemplazadas por robots, pero eso dependerá también de la evaluación económica y del repago de la inversión”, destacó y reconoció “en muchas empresas el ingreso de los pedidos aún es manual. Es cuestión de tiempo que deje de existir”.
Para González “los gobiernos deberían fomentar su aplicación, financiar proyectos, subsidiar desde lo impositivo la aplicación de las nuevas tecnologías”, pero advirtió que se deberá “afrontar la resistencia de sindicatos. De no resolver este problema se estaría demorando el desarrollo y la capacidad de competir con otros mercados más eficientes”.