El largo camino del caucho

El caucho es vital para la actividad productiva mundial. En la Argentina, mas de 160 empresas elaboran productos sobre la base de esta resina. Desde 1932 existe la Federation Argentina de la Industria del Caucho.
En Europa, el conocimiento del caucho data del descubrimiento de America. Se considera que Gonza¬lez Fernandez de Oviedo y Valdes y Pietro Martyre d’Anguiera Salaham fueron los primeros en niencionarlo. Dicen que Colon en su segundo viaje (1493/96) aprendiO de los nativos de Haiti, un juego practicado con unos bolos hechos con la resina de un arbol. En 1615, Torquemada describiO la preparation de una sustancia Ramada ulei, que los indigenas de Mexico obtenian de un arbol que llamaba ulequ,ahuil conocida despues como castilloa elastica del que extraian un liquid° lechoso. Este arbol tambien se encuentra en la ribera del Amazonas. •
En los albores de su uso comercial, los nativos americanos disponian del material fresco pero cuando se trasladaba a Europa se coagulaba y llegaba solo una masa gomosa e in¬soluble. Habia que hacerlo plastic° y homogeneo y hallar un disolvente adecuado, que un vez evaporado dejara al caucho con sus propiedad.es

originales. Despues de varios intentos, el verdadero progreso industrial se dio en 1831, cuando Charles Go¬odyear observO, por puro azar, que al tratar el caucho con azufre 3r al efecto del calor, su olor desaparecia, era mas elastic° y resistia los cambios de temperatura.
Brasil fue el mayor productor de caucho y casi con exclusividad en el mercado internacional, pero al cruel precio de la vida de miles de personas que llegaron para trabajar en la selva. Custodiados por guardias, trabajaban en condiciones de verdadera esclavitud.
Impulso brit» ‘co
Por encargo del gobierno britanico, Henry Wickman neva unas 70.000 semillas a Londres, recogida a orillas del rio Tapaj oz. Fueron aclimatadas en los jardin.es del Kew Botanic Gar¬den, especialmente adaptados con aire hiimedo y calor, procurando reproducir artificiahnente el clima del Amazonas. Los 2700 retofios que germinaron fueron luego trasplantados alas colonias inglesas de Malasia y Ceiran y en otras zonas tropicales. En 1910 empiezan aparecer en el mercado las primeras partidas de ese origen, y el caucho silvestre de Brasil no pudo competir, en precio y calidad, quedando los ingleses y holandeses dueflos del mercado.
Este estado de cosas, produjo en la industria de los Estados Unidos serias dificultades, hasta que en 1929,

Henry Ford consiguio una concesion del gobierno de Brasil, de mas de un millon de hectareas a 1100 km de la «costa y en plena selva, zona que se llama Fordlandin, donde se plantaron 4 millones de arboles, seleccionados e injertados por las mejores especies, esperando comenzar a producir para fines de la decada del 40.
Quimicos alemanes abocados para solucionar el bloqueo durante la Primera Guerra Mundial lograron reemplazar el caucho por un producto artificial, relativamente barato y eficaz, el caucho sintetico, empleando dimetilbutadieno. El neopreno fue el primer caucho sintetico de exit° comercial.
La gran industria automotriz favorecio el desarrollo del consumo del caucho, utilizados en los neumaticos. Se fabricaron mangueras, pisos, cintas transportadoras, pratesis dentales. Se lo utilizo para obras viales, hidraulicas, etc. En Holanda se construyO, en 1972, un novedoso dique de contention de las aguas para las imprevistas crecidas, con nylon cauchutado. El recordado Go¬odyear nunca se habra imaginado que su descubrimiento iba llegar a la Luna, la firma homonima proveye5 los neumaticos para los vehiculos Apolo. Ahora, Michelin experimenta desarrollos para eventuales nuevos vehiculos lunares.
La autora es historiadora, especializada en medios de transporte. Email: susanaboragno@fibertel.com.ar