Menos demanda anual de petróleo

La pandemia de Covid-19 afectó la demanda de petróleo y la llevó a la más baja desde hace más de 20 años.

Los choques gemelos de la demanda y la oferta hicieron que los precios de los futuros del petróleo cayeran 40% en marzo.


La demanda global de crudo caerá este año 9% por las restricciones tomadas ante la pandemia de Covid-19, según la Agencia Internacional de la Energía (AIE) que en su informe mensual señaló que, tras una década de crecimiento de la demanda, esta se desplomará hasta los 9 millones de barriles diarios debido a la ralentización del consumo.
La AIE explicó que las medidas de contención en 187 países y territorios ha sido detener la movilidad, por lo que la demanda en abril será 29 mb/d “más baja que hace un año, hasta un nivel visto por última vez en 1995”, mientras que para el segundo trimestre se espera que la demanda sea 23.1 mb/d, por debajo de los niveles de 2019 y consideró que en el segundo semestre, la recuperación será gradual.
Además, previó que “el suministro mundial de petróleo caiga en un récord de 12 mb/d en mayo, después de que la OPEP forjó un acuerdo histórico de producción para reducir la producción en 9,7 mb/d desde un nivel de referencia acordado. Como la producción de abril fue alta, el corte efectivo es de 10.7 mb/d”.
La agencia afirmó que “se espera que reducciones adicionales provengan de otros países, con los EEUU y Canadá experimentando los mayores descensos. La caída total de la producción no perteneciente a la OPEP podría alcanzar los 5.2 mb/d en el cuarto trimestre, y para el año en general la producción podría ser 2.3 mb/d más baja que el año pasado”. Tras lo que pronosticó una caída del rendimiento de refinación por una demanda fuertemente reducida de combustibles.
La AIE explicó que “los choques gemelos de la demanda y la oferta hicieron que los precios de los futuros del petróleo cayeran 40% en marzo. Brent se ha recuperado modestamente de un mínimo de 18 años, ya que los productores llegaron a un acuerdo para reducir la producción” y consignó que “las grietas por naftas y combustible para aviones continuaron sufriendo a medida que se introdujeron medidas de contención”.