Scania propulsa coche motor para Entre Ríos

 

La firma Materfer diseñó y fabricó un coche motor con un propulsor Scania que, en poco tiempo más, unirá Concepción del Uruguay con Paraná.

 

 

 

 

En su planta industrial de Ferreyra, al sur de la ciudad de Córdoba, la empresa Material Ferroviario SA (Materfer) fabricó un coche motor de dos vagones con un propulsor Scania. En el corto plazo, el vehículo –que funcionó sin inconvenientes durante las pruebas de campo- unirá las localidades entrerrianas de Concepción del Uruguay y Paraná.

El trayecto entre ambas ciudades comprende más de 300 kilómetros y, según se anunció desde la Secretaría de Transporte de Entre Ríos, tendrá 24 paradas. El tren está compuesto por dos vagones acoplados entre sí, uno motorizado y el otro remolcado. Ambos poseen una cabina de conducción para que pueda circular tanto hacia adelante como hacia atrás, evitando realizar maniobras de transferencia de vías en las terminales del recorrido.

Se trata de un coche de última tecnología, diseñado y producido íntegramente en los talleres de Materfer para un servicio de media distancia. Su desarrollo demandó casi 11 meses y participaron más de 180 personas.

Entre las comodidades principales, posee climatizador con aire acondicionado, calefacción, ventilación y deshumidificación; sector de sanitarios; 140 asientos reclinables con cinturón de seguridad, apoyabrazos y apoya vasos; portaequipajes y luces individuales de lectura.
Para la propulsión y generación se utilizó un motor Scania DI 12 56 A de 400 CV a 1800 RPM. Con él, la formación puede alcanzar una velocidad máxima de 120 Km/h. Sin embargo, se limitó electrónicamente la velocidad final a 80 km/h debido al estado de las vías en la actualidad. Durante las pruebas que se llevaron a cabo, el consumo de gas oil estuvo en el orden de los 15 litros cada 100 kilómetros, número similar al de un auto de turismo en ciudad.

En la actualidad, Materfer está produciendo un segundo coche motor para sumarse al servicio entrerriano y en el corto plazo serán 4 los coches fabricados.

Las cabinas de conducción son amplias y permiten ejecutar todas las funciones del tren. Eso incluye la apertura de puertas (la unidad no puede moverse si alguna se encuentra abierta), el control del climatizador y el encendido y apagado de las luces, entre otros aspectos. La longitud total del coche motor es de poco más de 45 metros.

Los datos de la central electrónica del motor son transmitidos al tablero de comando, desarrollado también por Materfer, con el asesoramiento técnico de Scania Argentina.

Cada cabina posee un asiento para el conductor y otro para el acompañante. En el pupitre principal se destacan, entre otros, la palanca de aceleración, la de freno, los comandos de iluminación, la selectora de la caja de velocidades (que transmite los cambios de forma automática) y una pantalla táctil (o “touch screen”) de 10,5 pulgadas. En ella se muestran, a pedido del conductor, el velocímetro, el consumo y nivel de combustible, el tacómetro, el porcentaje de aceleración, la presión de aceite, la temperatura del líquido refrigerante, la posición del freno y la tensión de las baterías principales. Para ver hacia atrás en las estaciones (o durante el viaje, si se desea), se montaron cámaras sobre las puertas de la cabina, que transmiten las imágenes a una pantalla del tablero de instrumentos.

Al igual que sucedió en el resto del país, el ramal ferroviario que une el este y el oeste entrerriano fue cerrado en la década del 90. Desde entonces, muchos pueblos quedaron prácticamente aislados y sus vecinos exigieron que el tren vuelva a circular. El coche motor fabricado por Materfer y propulsado por Scania es un pequeño paso que va en camino a la recuperación de la red ferroviaria nacional y, con ella, la de muchas localidades.

Scania es uno de los líderes mundiales en la fabricación de camiones y ómnibus para transportes pesados, y de motores. Una gran parte de los negocios de la compañía consiste en ofrecer servicios para sus clientes, lo que les asegura soluciones de transporte muy efectivas en términos de costos operacionales y la máxima disponibilidad de los vehículos. Cuenta con un plantel de 35.000 empleados y plantas de producción en Europa y Latinoamérica. Scania comercializa sus productos en un centenar de países y durante el año 2008 sus ingresos alcanzaron 8,1 mil millones de Euros.

Fuente: Scania Argentina