Eliminan beneficios para la soja importada

El Gobierno nacional publicó este lunes una medida según la cual se elimina la reducción fiscal que favorecía a la soja importada, de modo temporal, para su procesamiento y exportación. Así, se busca privilegiar el uso de granos locales en la elaboración de harina y aceite.

La medida, publicada en el Boletín Oficial, impulsaría la venta de las amplias reservas de soja que tienen los productores del país -el mayor proveedor mundial de derivados de la oleaginosa-, permitiendo el ingreso de más divisas en momentos en que el peso sufre una fuerte presión bajista.

En tanto, el mayor damnificado será Paraguay, ya que es el mayor proveedor de granos de soja de la Argentina. De hecho, se importa entre 1,5 millones y 2 millones de toneladas al año.

"Con la finalidad de proteger los ingresos de los productores agrícolas agregando valor a las mercaderías destinadas a la exportación debe privilegiarse la utilización de materias primas nacionales sobre las importadas", de acuerdo con la resolución oficial.

La eliminación de la rebaja fiscal -que reducía el impuesto a la exportación de derivados elaborados con soja importada- también ayudaría a mejorar la recaudación tributaria, que tras un lustro de crecimiento comenzó a desacelerarse en los últimos meses debido a la crisis económica internacional.

Los productores argentinos, enfrentados desde hace un año con la presidenta Cristina Fernández de Kirchner por las retenciones de la oleagionsa, tienen en su poder cerca de 5 millones de toneladas de soja de la cosecha anterior, según datos de la Bolsa de Cereales de Rosario.

Sin embargo, los agricultores están esperando una mejora de los precios internacionales y una eventual reducción de impuestos para vender la mercadería, lo que redujo el ingreso de divisas al país y perjudicó a la poderosa industria procesadora local, una de las más desarrolladas del mundo.

Sin la reducción impositiva, las fábricas procesadoras deberán tributar más impuestos al exportar los subproductos elaborados con materia prima paraguaya o deberán ofrecer un valor más alto por la soja argentina.

"Lo que hace el Gobierno con esta medida es quitarles un volumen de molienda (a las fábricas) con la intención aparentemente de obligarlos a salir más agresivamente al mercado para que la gente venda la soja", explicó el analista Enrique Erize a Reuters.

 

Repercusiones

En Paraguay, los exportadores buscan conocer más detalles sobre la medida para determinar los efectos sobre el comercio.

"Cualquier mercado importante que cambie sus reglas de juego nos afecta", dijo a Reuters Hugo Pastore, responsable de la firma Noble Paraguay, que exporta granos al mercado argentino.

Esta resolución llegó luego de una feroz sequía que está perjudicando a las cosechas de Argentina y Paraguay -el tercer y el cuarto exportador mundial de granos de soja, respectivamente-, que llevará este año a una oferta regional inferior a la del ciclo 2007/08.

A nivel nacional se produciría 39,4 millones de toneladas de soja en la temporada 2008/09, según la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, aunque el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) proyectó en marzo que la cosecha podría llegar a los 43 millones de toneladas.

En tanto, Paraguay estima que su cosecha sería de sólo 4,15 millones de toneladas, según cifras oficiales.
 
Fuente: IProfesional
08 – 04 – 09
MT