El MV Monte Alegre, con capacidad de 5.560 TEUs forma parte de la moderna flota de la naviera alemana.
La fiesta de Hamburg Süd y el puerto de Exolgán fue completa y, además, tuvo sabor a revancha. En 2005, la compañía alemana traía el MV Monte Rosa a Buenos Aires en su viaje inaugural y todo estaba previsto para el gran festejo en Exolgan. Sin embargo, horas antes de su arribo, la nave debió desviarse a Puerto Nuevo porque su capitán consideró que no estaban dadas las condiciones de seguridad necesarias en los muelles de Dock Sud.
“Eso ya es historia, porque hoy este tipo de buques recala normalmente en Exolgán. La realidad actual nos muestra al buque ‘Monte Alegre’ en Exolgan. Además, es la primera vez en los 137 años de historia que tenemos en Argentina, que un buque es bautizado en el país”, dijo con orgullo Joachim Konrad, director ejecutivo de la naviera.
Este tipo de buques fue concebido especialmente para la costa de Sudamérica, por su escaso calado de 12,50 metros. Su capacidad máxima de carga es de 71.270 toneladas, en una eslora de 272 metros y manga de 40 metros, duplica la capacidad de los anteriores buques en este servicio. Además, por su ancho, entra en la categoría de buques que no pueden atravesar el canal de Panamá.
Dentro de la capacidad de 5.560 TEUs, posee 1.300 enchufes para contenedores reefers, por lo que se transforma en un vehículo especial para el transporte de perecederos de alto valor agregado como carne y frutas.
“Ser pioneros en la tecnología de avanzada de los buques ha sido siempre una tradición de nuestra compañía. Con buques de la clase “Monte” este desarrollo no llegó aún a su fin. Ya estamos trabajando en las naves de la llamada clase “Santa” que comenzarán a operar a partir del segundo semestre del próximo año. Estas nuevas embarcaciones tendrán una eslora de 301 metros, manga de 43 metros y capacidad para más de 7.000 contenedores, 1.600 de ellos refrigerados”, sentenció Konrad.
Visión positiva
No deja de extrañar que Hamburg Süd haya redoblado su presencia en tiempos en donde el retraimiento reina para la mayoría de las empresas. Frente a este panorama, fueron terminantes los conceptos expresados por Joachim Konrad.
“Si uno mira la situación actual del desarrollo económico mundial, podría decirse que este tipo de buques es demasiado grande para esta época. Sin embargo, consideramos que si bien la crisis financiera actual golpea a la economía real, la economía global no va a ceder. Necesitamos pasar por un par de años difíciles, pero luego la economía va a recuperarse y volverá a su plenitud. Con el ‘Monte Alegre’, sus buques gemelos y los de la nueva clase Santa Hamburg Süd reafirma su apuesta al futuro del transporte marítimo y de los servicios de excelencia”, manifestó el ejecutivo.
Antes de la clásica ceremonia de bautismo, Brigthe Oetker, madrina de la nave, señaló su complacencia ante este moderno buque portacontenedores.
“Un buque nuevo es un signo de optimismo, y en tiempos de crisis se necesitan de estas señales. Especialmente me agrada el nombre de ‘Monte Alegre’, referenciado a lo ameno y lo venturoso. Es el augurio de un próspero porvenir una vez que se haya superado la meseta de estos tiempos difíciles”, afirmó el directivo.
Desde su fundación, en 1871, Hamburg Süd se ha convertido en un proveedor de transporte oceánico de alta calidad a nivel mundial y en una fuente de soluciones logísticas.
Su sólida posición en el mercado, enfocada en los tráficos Norte – Sur, la ubica dentro de las 20 líneas de transporte de contenedores más grandes del mundo. En los últimos años ha absorbido destacados servicios de línea. Su última adquisición fue la de Costa Containers Lines (CCL), la línea italiana de contenedores, a principios de 2006.
Fuente: El Cronista
27 – 09 – 03
MT
