“La estrategia es a largo plazo”

Adriano Merigli, presidente local de Volvo Trucks & Buses, marcó la importancia de tener una mirada a futuro, mientras se prepara para los desafíos de las energías alternativas.

A futuro, en Volvo creemos que los camiones serán eléctricos y que se requerirá de una infraestructura acorde.


En camino hacia los 20 años en la Argentina que cumplirá en 2021, Volvo atravesó, como el resto de sus competidores, siete meses de una intensidad inédita. Más allá de adaptaciones puntuales, la compañía mantiene intactos sus planes a largo plazo y las expectativas de crecimiento.
Adriano Merigli, presidente de Trucks & Buses de la terminal, confirmó la apuesta de la marca en el país y destacó su protagonismo en el mercado local. Al respecto, hizo un recorrido por las distintas iniciativas llevadas a cabo desde el inicio de su gestión hace más de un año, las que fueron apuntaladas por una inversión de 54 millones de dólares en mayo pasado.

 

En este contexto, ¿qué medidas pudo llevar adelante la marca?
Se hizo un refuerzo en el área de servicios para estructurar una red de concesionarios que cada día es más fuerte. Tenemos los planes de mantenimiento, talleres in situ, lo que hace que la compañía se consolide y cree las condiciones para que se invierta en sus productos. Hace dos o tres años venimos con crecimientos sostenidos. Apuntamos a estar cerca del cliente con la posventa, que es uno de los ejes principales de nuestro desarrollo local.

 

¿Qué importancia tiene la Argentina para Volvo?
El país es el segundo mercado más grande de Latinoamérica. Hoy debe sumar 6.800 camiones de forma anual, aunque debería estar entre las 15.000 y 16.000 unidades. No es el corto plazo lo que determina la importancia de la Argentina para cualquier marca. Es mucho más amplia la mirada que tenemos que hacer para explotar las posibilidades.

 

Foto: Ana Garabedian

¿Y en el mientras tanto cómo se encara tamaño desafío?
En mayo, el Grupo Volvo invirtió en el país 54 millones de dólares. Fue un aporte hecho a largo plazo para la red de concesionarios, financiación de clientes, disponibilidad de reAlejopuestos o capacitación. Hay un plan de expansión de los talleres in situ, que es cuando creamos un taller dentro de las instalaciones de un cliente. Hoy poseemos seis unidades de este tipo y para la mitad de 2021 habrá dos más.

 

Uno de los ejes del negocio de la terminal fue la incorporación de nuevos proveedores. ¿Cómo está avanzando al respecto?
Esa fue una estrategia que desarrollamos desde 2014. Para armar un camión o un bus en el país se tendría que importar el 85% de los repuestos. Es por eso que la idea fue trabajar con grupos de proveedores que exporten a plantas de la marca en el mundo. Cada día ponemos más esfuerzos en este tipo de acciones.

 

¿Cuál es el futuro para el transporte con el desarrollo de energías alternativas?
Volvo es un jugador muy importante a nivel global en este tema. Hace tiempo opera e invierte en todos los tipos de energías alternativas. En otras partes del mundo hay experiencias en marcha, como la de camiones eléctricos destinados a la recolección de basura en ciudades europeas. En GNL se dan ventas importantes de unidades. A su vez, Volvo cerró un acuerdo con el grupo Daimler Truck AG para estudios y desarrollos de celdas de combustible de hidrógeno. Por otra parte, como mencioné durante la presentación de la “canasta” energética para el transporte de cargas junto a la Fadeeac, dependemos mucho de la matriz energética del país.

 

¿Por qué?
Podríamos traer hoy camiones eléctricos o a gas, ¿pero dónde se los podría cargar? Por ahora, participamos de proyectos y cuando se necesiten los productos los traeremos.

 

¿Algún combustible tendrá más preeminencia sobre otros o se impondrá un mix de energías?
Hoy, por la oferta que hay para explotar, la transición en la Argentina será el gas. A futuro, en Volvo creemos que los camiones serán eléctricos y que se requerirá de una infraestructura acorde. Actualmente, en Latinoamérica, conviven los dos tipos de productos.

 

¿Cómo está el nicho de los buses?
Hace tiempo viene muy bajo. Es en una situación más difícil. En los urbanos somos muy jóvenes. Hicimos algunas ventas el año pasado y ahora, pero somos un jugador pequeño todavía. Para larga distancia teníamos una participación parecida a la de los camiones, cerca de un 15% del mercado, pero hoy está a menos de 100 buses por año. Igualmente, nos mantenemos cerca de las empresas, ayudando con las necesidades financieras que pueda haber. Además, continuamos con la actualización de productos, servicios de posventa. No será un mercado fuerte el próximo año.