En una temporada de poca actividad para el transporte de carga, continúan los enfrentamientos por el transporte de la cosecha de granos entre grupos de transportistas independientes y empresarios afiliados a la Asociación de Transportistas de Cargas de Rosario (ATCR).
Esta vez, el que hizo la denuncia fue el vicepresidente de la Asociación de la ATCR y prosecretario de la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (Fadeac), Enrique Corsiglia. El empresario denunció amenazas y hostigamiento por parte de transportistas vinculados con la Federación de Transportistas Rurales Argentinos, (Fetra) por hacer cargas en zonas en las que, supuestamente, la ATCR no estaría habilitada para trabajar, de acuerdo con la zonificación establecida de hecho por Fetra.
Por otro lado, el productor Francisco Santillán, delegado de la Sociedad Rural en el norte de Buenos Aires, denunció haber sufrido un piquete de 20 camioneros en un establecimiento en la localidad santafecina Sancti Spiriti, lo que impidió la normal carga de la cosecha. La razón que esgrimieron los invasores para tomar el campo, dijo Santillán, es que él no usa los camioneros locales para realizar el flete.
Santillán ya había recibido tres intimidaciones de este tipo. En uno de estos episodios sus silos de maíz fueron pinchados. También sufrió un piquete por parte de estos grupos la planta de Cargill en Puerto San Martín. Tanto Santillán como Cargill dejaron de sufrir presiones cuando cedieron a las exigencias de los transportistas, y les dieron una parte de la carga de la cosecha.
Otro de los afectados por el hostigamiento fue el transportista Jorge Ostoich, que radicó varias denuncias en la policía y en la justicia santafecinas.
Un productor vecino del campo de Santillán, que pidió reserva de su nombre, sufrió un piquete por cinco días por no ceder a las presiones.
El problema del transporte ya lleva varias semanas. El nudo de la cuestión está en que agrupaciones de camioneros vinculadas con Fetra pretenden que las cargas de granos se hagan exclusivamente con los transportistas de la localidad adonde se hace la carga.
"Normalmente, un empresario puede trabajar en cualquier lado. Pero estos transportistas se presentan en los campos y cortan el trabajo si uno no contrató al transportista local. Pretenden que si no uno usa los servicios de ellos pague una comisión", dijo Corsiglia.
"Tenemos todos los días denuncias de nuestros asociados por estos grupos que quieren quedarse con el trabajo de la zona o cobrar comisiones por ser los locales en la zona de cargas. Esto está dificultando mucho nuestro trabajo", explicó Marcelo Becci, presidente de ATCR.
"No es justo que empresas que trabajan en blanco sean apretadas por un pequeño grupo de gente que usa métodos de amenaza y armas de fuego, o destroza camiones, para lograr sus fines", explicó Becci, que confirmó que los hostigamientos se producen por transportistas vinculados a Fetra. "Todo esto se denunció a las autoridades de Santa Fe y nacionales", dijo Becci.
Varias fuentes consultadas señalaron que detrás de las presiones están el jefe de sindicato de camioneros, Hugo Moyano, que busca poner el pie en el negocio del transporte de los granos, aliándose a los empresarios de Fetra, cámara rival de la Fadeac.
Ya durante las protestas del campo en 2008 y 2009 Moyano y la Fetra hicieron movidas en conjunto repudiando la actitud del campo.
Al parecer, poner el pie en el negocio de los granos es un viejo anhelo de Moyano, que ya en 2007 intentó sin éxito poner puestos de control de su sindicato en las aceiteras.
Se intentó contactarse con Fetra y con el sindicato de camioneros para conocer su versión de los hechos, pero no tuvo éxito.
deNeXos – 23/06/09 – MT
Fuente: LA NACION
