“El mercado de divisas se encuentra en un momento muy interesante para importadores europeos que comercian fuera de la zona Euro”, asegura Daniel Talavera en la nota que sigue (difundida hoy en veintepiés.com).
La crisis financiera se está cebando con el dólar y la libra esterlina, que desde principios de año están perdiendo fuerza respecto al euro. Durante la semana pasada la paridad euro-libra esterlina alcanzó 0,8982 mientras que con el dólar, la paridad alcanza 1,4699 (el mejor cambio en lo que va de año) habiéndose depreciado un 3,7% desde enero.
Las fluctuaciones en el mercado de divisas son impredecibles pero me arriesgo a decir que la tendencia, al menos con el dólar, es la de mejorar y acercarse aun más a los niveles de 1:1,49 de antaño. Los bajos tipos de interés y la pérdida del tirón del dólar como moneda conductora en el mercado internacional juegan en su contra.
Con la libra esterlina está sucediendo más de lo mismo. La suma de los problemas económicos y políticos en el Reino Unido están devaluando en exceso una libra que se acerca peligrosamente a una paridad 1:1,1 con respecto al Euro.
En definitiva, el euro es una moneda privilegiada que coge fuerza como currency en el comercio internacional y los importadores no lo pasan por alto especialmente ahora.
El cambio de divisas adquiere protagonismo en estos meses. La cuestión es emplear tantas armas se tenga para afrontar la situación de crisis, incluido el cambio de moneda. Es significativo que si el cambio de divisas era en España tradicionalmente un tema secundario en el seno de la compañía, que se dejaba en manos de la entidad financiera, en la actual situación de crisis "tantos dólares obtienes con equis cantidad de euros" se ha convertido en un asunto a tener en cuenta. Los cambios de divisa deberían ser controlados y negociados en cada transacción por la compañía.
La tendencia actual de las compañías Import-Export es asegurar el tipo de cambio favorable de estas semanas con respecto al dólar con la compra de divisas a través de Forward
Contracts
Los Forward Contracts no solo aseguran un tipo de cambio beneficioso que estimule las transacciones comerciales, además ayudan a los importadores de ultramar a realizar operaciones al margen de los bancos en tiempos de crisis. Es una manera de obtener independencia financiera e ir generando liquidez. La realidad que estamos viendo en Currency Solutions es que las empresas están intentando compensar la falta de financiación con todos sus recursos, incluida la fortaleza del euro y la ventaja de tener un buen tipo de cambio.
Coger ventaja de la situación actual del euro es asegurarse un margen de beneficio. Por ejemplo, tenemos el caso de un importador de licores desde Méjico y Canadá que compra US$ con sus euros para efectuar los pagos de sus pedidos. Desde mayo, cada vez que el dólar tiene una caída considerable respecto al euro, nuestro cliente hace una operación de reserva de divisas con un depósito del 10% para maximizar futuras transacciones.
En estos tiempos difíciles las empresas Import-Export tienen que modernizar su modus operandi y no subestimar aspectos que antaño fueron secundarios como es el cambio de divisas. Al final del año fiscal un buen tipo de cambio y la correcta estrategia pueden suponer un ahorro de varios miles de euros.
Daniel Talavera
d.talavera@currencysolutions.com
Fuente: Veintepiés.com
