La Argentina está mirando a Africa.

Con la misión multisectorial a Angola y a Sudáfrica que se realizará a fin de mes, el Gobierno busca aumentar el intercambio comercial con un continente con el que se ha propuesto profundizar vínculos; el potencial exportador de la Argentina es de más de US$15.260 millones.

 


Es difícil que en estos días alguien mencione al continente sin que, automáticamente, se asocie la cuestión con el mundial de fútbol que se disputará en Sudáfrica el año que viene.

Sin embargo, lejos de la incertidumbre que genera al país por estas horas el tema, la Cancillería termina los preparativos de una misión multisectorial a Angola y Sudáfrica para avanzar sobre un terreno que, hoy por hoy, aparece un tanto más previsible: fortalecer y aumentar el intercambio con Africa.

Entre el 28 del actual y el 3 de octubre, una treintena de empresas participará de los seminarios económicos y rondas de negocios con contrapartes en Luanda (Angola) y Johannesburgo (Sudáfrica).

¿Qué es lo que hace atractivo a un país como para que se dirijan hacia allí las políticas de promoción de exportaciones? ¿Por qué se elige a ese mercado y no a otro?

La respuesta es sencilla. En el caso de Angola y Sudáfrica, por ejemplo, le compran al mundo 15.377,85 millones de dólares de la oferta exportable argentina (es decir, productos que elaboramos o generamos en el país exceptuando las commodities ). El detalle es que de ese total, el país sólo les vende 115,08 millones de dólares. Ergo: el potencial de negocios es de 15.262,77 millones de dólares.

La cifra surge de un cruzamiento de datos que se realiza en la Subsecretaría de Comercio Internacional de la Cancillería, donde funciona la dirección de Inteligencia Estratégica Evaluativa Comercial.

El área se encarga de rastrear en qué lugares del mundo se están comprando productos de la oferta exportable local (excluidas las commodities ) pero que están siendo abastecidos por otros países.

Por otra parte, las naciones del Africa subsahariana crecieron entre 2003 y 2008, en promedio, el 5 por ciento anual. Si bien es cierto Angola y Sudáfrica tienen perfiles y grados de desarrollo diferentes, las proyecciones son positivas en ambos casos.

En busca de inversiones

Durante una reunión informativa que se realizó hace un par de semanas en el Palacio San Martín, el embajador de Angola en la Argentina, Fernando Dito, y la responsable de marketing de la embajada de Sudáfrica en el país, Florencia Achcar, detallaron las características, oportunidades y necesidades de cada mercado.

Dito dejó en claro que más allá del intercambio comercial, la principal necesidad de Angola pasa por las inversiones.

"Necesitamos inversiones de nuestros amigos empresarios argentinos. Somos un país en vías de desarrollo, con un pasado triste [27 años de guerra civil tras la independencia de Portugal], con conflictos internos que destruyeron mucha infraestructura, pero estamos en pleno proceso de reconstrucción. A pesar de que somos mucho más chicos, tenemos muchas similitudes con la Argentina", explicó frente a unos 70 empresarios que fueron a escuchar de qué se trataba la propuesta.

Hace pocos días, el ministro de Transporte de Angola, Augusto Silva Tomás, hizo especial hincapié en la importancia de la infraestructura portuaria para el desarrollo del país. Según publicó la agencia Angola Press , al inaugurar el seminario " Managment moderno de puertos", el funcionario habló de la necesidad de contar con terminales eficientes que permitan a su país ocupar un papel preponderante en la economía de la región. "Estos son días de acción, innovación y respuestas efectivas para los problemas. Aquellos que no puedan estar a tono con el desarrollo, quedarán varados", vaticinó.

Casi al mismo tiempo, en Buenos Aires, el representante del gobierno angoleño admitió que su país atraviesa dificultades como los elevados índices de desempleo y pobreza, pero habló de un futuro "próspero". Parte de sus proyecciones deben basarse en el sólido aporte que dan a la economía angoleña dos de las actividades principales en el país: la extracción de petróleo y diamantes, que en el caso del primero tuvo tasas de crecimiento medio del 25% entre 2004 y 2007.

Otro de los rubros que el embajador Dito eligió destacar es el de la agricultura. "Mi país tiene 1.600.000 km2 pero hay muchas áreas que no son cultivadas porque no tenemos maquinarias. Necesitamos transferencia de tecnología, y en ese sentido nos interesa especialmente reforzar la cooperación con las provincias. El centro de Angola está más desarrollado, es en el norte donde se necesitan más inversiones. Tenemos una cultura agropecuaria muy similar a la de aquí y necesitamos, además de inversiones para el sector, capacitar a nuestros jóvenes", comentó.

Hub para la región

Sudáfrica se planta de otra manera. El foco central está puesto en un dato que se insinúa y que e
l país quiere terminar de consolidar: ser la puerta de entrada al continente.

Achcar dijo que para tener una estrategia efectiva para Sudáfrica y la región hace falta pararse sobre un trípode: vincularse a través del comercio bilateral y mirar al país como hub regional, pensar en inversiones de doble vía, y en cooperación técnica y transferencia de tecnología Sur-Sur.

La funcionaria habló de que es necesario que los países replanteen sus estrategias comerciales porque la interdependencia del mundo actual hace que solos sea casi imposible alcanzar progresos.

"Los países del hemisferio Norte son el foco de nuestras economías y eso genera un alto grado de vulnerabilidad para nuestros países. Debemos diversificar el riesgo, ampliando el número de socios comerciales y enfatizando la relación Sur-Sur. Los países del Sur podemos ser potenciales mercados entre unos y otros para colocar productos y mercados en los que existen recursos para los otros", comentó frente al auditorio.

Luego, explicó que hay 26.000 productos que la Argentina importa desde países del hemisferio Norte que podrían ser provistos por Sudáfrica. Y alertó: "Si la Argentina y Brasil trabajaran en conjunto producirían la cantidad de productos necesarios que Sudáfrica hoy en día importa de otros destinos, especialmente de los países del hemisferio Norte".

Sudáfrica es uno de los países más ricos del mundo en cuanto a riqueza mineral. Cuenta con las mayores reservas del mundo de oro, manganeso, cromo y metales del grupo de platino. Sin embargo, actualmente, su economía es bien diferente de la de hace un siglo, basada en la minería y la agricultura.

Hoy el país presenta una infraestructura financiera y física sofisticada, una red eficiente de telecomunicaciones y energía, y una de las primeras diez bolsas de comercio del mundo.

Desde la finalización del apartheid , Sudáfrica se incorporó completamente a la economía mundial y es miembro activo de la OMC.

Ha profundizado su apertura comercial a través de la liberalización y racionalización del sistema tarifario y procura la eliminación de las barreras no arancelarias.

El promedio de los aranceles aplicados por Sudáfrica ronda 8,31% -uno de los niveles tarifarios más bajos del continente-.

El país, que figura entre los primeros 15 socios comerciales de la Argentina -en 2006 llegó a ocupar el puesto 11° y en 2007, el 12°-, es el principal receptor de exportaciones argentinas en Africa. Entre 2003 y el año pasado, las ventas argentinas sumaron casi 4290 millones de dólares.

Casi sobre el final de su exposición, Achcar enumeró los motivos por los que las empresas argentinas deberían invertir en Sudáfrica o asociarse con empresas locales: facilita el acceso al mercado local y regional, y a licitaciones locales y regionales; reduce obstáculos comerciales; y permite la transferencia de tecnología, entre otras cuestiones, destacó.

Luego, habló de la cooperación triangular. Otra de las facetas por aprovechar. Se trata de la utilización de fondos disponibles de terceros países para promover cooperación que redunde en la venta de bienes y servicios argentinos.

Luis María Kreckler, subsecretario de Comercio Internacional, dijo que la Argentina hace tiempo que mira a Africa porque, por un lado, es uno de los sitios en los que más aumentaron las exportaciones argentinas en los últimos años; y por otro, porque nuestra oferta exportable resulta atractiva para los países de ese continente. Por eso, explicó, en los últimos tiempos se incrementaron las acciones de promoción de exportaciones.

Según los trabajos de inteligencia comercial, los sectores con mejores perspectivas son: alimenticio (carnes, pescados y mariscos, leche en polvo, jaleas y mermeladas, golosinas, preparaciones alimenticias, cereales, etc.); frutihortícola; vinos finos; aceites; sector plástico y sus manufacturas; sector químico; sector maderas y muebles; máquinas, aparatos y artefactos mecánicos; máquinas, aparatos y material eléctrico y sus partes; sector textil; calzados; sector pieles, cueros y sus manufacturas; maquinaria agrícola; tecnología agropecuaria; GNC; autopartes; materiales para la construcción; energético; turismo; infraestructura y telecomunicaciones; equipamiento médico y hospitalario; y farmacéutico.

El desembarco en Angola y Sudáfrica es un capítulo en la relación más amplia que el Gobierno se propone construir con Africa. Este es un primer paso.

deNeXos – 15 / 09 / 09 – MT

Fuente: La Nación