Un momento para bajar los costos logísticos

 

 

 

 

 

Patrick Campbell, el máximo referente local del Grupo NYK-Multimar y destacado miembro del Centro de Navegación, da su visión sobre la situación actual y la inminente necesidad de bajar los costos logísticos.

 

-¿Cree que estamos ante una nueva ola de fusiones?

-Definitivamente. Es un momento de supervivencia. No podés seguir construyendo barcos para inundar el mercado sabiendo que así lo único que hacés es empeorar la situación. Es preferible invertir en tomar compañías. Los grandes consorcios del mundo se están repensando.

-¿En qué sentido?

-Y… van a tener que convivir y dejar de lado la ambición de mercado. La industria está concentrada en diez jugadores que van a tener que replantearse el camino, porque sobrevivir solos es una utopía. Lo más común es ver acuerdos entre compañías y recorte de estructuras.

-¿Despidos?

-Sí, tal vez no masivos, pero se verá la necesidad de cortar la "grasa", de estar más "flacos". Pasó acá, hace poco, que una empresa de transporte muy importante se fue porque el volumen del negocio no lo justificaba [habla de la firma de logística Ryder]. Muchas filiales van a pasar por este proceso.

-NYK venía haciendo acciones ligadas al medio ambiente con un fuerte correlato económico. ¿Están mejor preparados entonces en tema de costos?

-Se incorporó mucha tecnología a los barcos para que no usen los propios generadores en puerto, sino la electricidad de los muelles; se trabajó mucho en el consumo correcto de combustible. Lo mismo en materia de contenedores: en vez de salir a construir se analiza constantemente la reutilización efectiva de los equipos en todo el mundo.

-¿Están reviendo los planes de inversión?

-En algunos casos. Pero los planes de inversión no se archivan. Estos serán años de reingeniería; la crisis no va a durar toda la vida y cuando se supere vendrá un crecimiento muy fuerte, con una economía más sana.

-¿Hay alguna válvula de escape para esta región por estar dentro del tráfico Norte-Sur?

-Sí, la región misma. Veo la posibilidad de generar nuestro propio volumen intrarregional. Y para eso habrá que bajar las restricciones, darle fluidez al movimiento de cargas. Es un gran momento para usar el espacio libre en los barcos de la región, para lograr una logística que baje los costos internos. Tenemos que usar todas las herramientas a disposición, y aprender a ser más flexibles.

 

Fuente: La Nación